AVANCE OFTALMOLÓGICO

Llegan las pantallas graduadas, adiós a las gafas

El ingenio, basado en la tecnología 3D, ayudará a ver correctamente tabletas y GPS a personas mayores de 50 años

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Investigadores del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT, por sus siglas en inglés) y de la Universidad de California han desarrollado una nueva pantalla que corrige automáticamente los defectos visuales, sin necesidad de usar ningún tipo de lentes o gafas.

Según ha explicado el MIT en su página web, esta técnica sirve para desarrollar pantallas de GPS para conductores con hipermetropía, que podrían consultarlas sin tener que llevar gafas puestas, o incluso para personas que usen soportes electrónicos para leer, que tampoco necesitarían una ayuda extra en su visión para ver correctamente el contenido de los libros.

La pantalla es una variación de una tecnología 3D sin gafas.

"Tenemos una solución diferente que básicamente pone las gafas en la pantalla en vez de en tu cabeza. No podrá ayudarte a ver el resto del mundo con una mayor definición, pero hoy en día pasamos una gran parte de nuestro tiempo interactuando con el mundo digital", ha declarado Gordon Wetzstein, uno de los cocreadores de la pantalla.

Heredera de la tecnología 3D

La pantalla es una variación de una tecnología 3D sin gafas también desarrollada por el grupo Camera Culture. Aún así, el MIT ha explicado que donde la pantalla en 3D proyecta imágenes algo diferentes en ambos ojos del espectador, la pantalla de corrección de visión proyecta imágenes diferentes en la pupila del espectador.

Así, una de las dificultades con esta técnica es que simular un único píxel requiere muchos píxeles en la propia pantalla física. El ángulo en el que la luz debería llegar de la imagen simulada está más definido que el ángulo en el que la luz llegaría de la misma imagen reflejada en la pantalla. De esta manera, los objetos físicos que proyectan luz en el lado derecho de la pupila tienen que ser desviados hacia la izquierda, y viceversa.

"La mayoría de la gente de más de 50 ó 55 años probablemente pueden ver bien de lejos, pero no pueden leer un libro. En un coche, una persona puede llevar lentes varifocales, pero lo que hacen es distorsionar la geometría del mundo exterior, así que si no las llevas puestas todo el rato, tienes un problema.

En cambio, los investigadores del MIT y de la Universidad de California tienen una gran solución", ha asegurado Chris Dainty, profesor en la University College London Institute de Oftalmología.