El mapa de la indignación

Unas120 asambleas locales y de barrio autónomas descentralizan y extienden el 15-M en Catalunya

El movimiento, no sin dificultades internas, intenta encajar la acción de proximidad con un plan global

FIDEL MASREAL / Barcelona

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La indignación se ha descentralizado en Catalunya.Como una mancha de aceite, el movimiento, que durante semanas tuvo su epicentro en laplaza de Catalunyade Barcelona, se ha extendido a más de 120 núcleos en otras tantas localidades y barrios. Pequeñas asambleas que han transformado la indignación en una red en la que las reivindicaciones locales están tomando, por ahora, el testigo de grandes movilizaciones como la del pasado día 19 en Barcelona y en las principales ciudades catalanas. Este era el objetivo de los indignados: desvincularse de la acampada del centro de Barcelona ¿que ha entrado en una evidente degeneración al margen del15-M¿ y dar voz al activismo local. Ese fue el mensaje de la asamblea de barrios celebrada ayer en la plaza de Catalunya: coordinación y descentralización.

El alud de actividades locales está en plena efervescencia. Los indigandos de Montcada i Reixac (Vallès Occidental) han iniciado una campaña en favor de la reducción de sueldos de los concejales y cargos de confianza municipales. En El Masnou (Maresme) se están dedicando a exigir mejoras de participación ciudadana. Los indignados de la Noguera han ensayado un referendo popular sobre cuestiones como la política urbanística local y el rescate de bancos con fondos públicos. La asamblea de Figueres (Alt Empordà) ha invitado al movimiento de Afectados por la Hipoteca a participar en su próxima reunión. En Sant Cugat (Vallès Occidental), los indignados preparan un pregón alternativo para las fiestas populares. Undesafío del 15-M, vinculado al riesgo de la falta de acción política, es volver a encontrar mínimos comunes denominadores en este enjambre de asambleas. Más allá de un documento de mínimos, sigue sin existir un texto con las reivindicaciones compartidas.

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