Las nuevas tecnologías en la escuela

Una red precaria y profesores poco formados limitan las aulas digitales

Clases de inglés con ordenador en una escuela de L'Hospitalet, en una imagen de archivo.

Clases de inglés con ordenador en una escuela de L'Hospitalet, en una imagen de archivo. / periodico

MARÍA JESÚS IBÁÑEZ / ARCELONA

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Un tercio de las escuelas e institutos públicos de Catalunya tienen problemas para conectar de forma segura a internet, sin que se produzcan caídas repentinas del sistema, ni colapsos en la red. Lo reconoce la Conselleria d'Ensenyament de la Generalitat, que ha incluido esos 853 centros en un plan para mejorar su conectividad, lo que significa que, si no surgen imprevistos técnicos o de financiación, dispondrán de un servicio de banda ancha (o de alta capacidad) antes de finales del 2015. La fragilidad de la conexión es, en opinión de los usuarios, el principal escollo para el uso de dispositivos digitales en las aulas catalanas.

Pero no es el único problema. Pese a los progresos hechos en los últimos años, los profesores siguen teniendo carencias en materia de nuevas tecnologías. Saben usar internet y las herramientas más habituales, eso sí, pero en muchos casos todavía no les sacan todo el partido posible. Hay estudios que cifran en poco más de la mitad el número de docentes de la escuela pública que utilizan habitualmente las nuevas tecnologías en sus clases, posiblemente porque desconocen todo su potencial pedagógico.

Tampoco ha resultado demasiado efectivo el plan Escuela 2.0, puesto en marcha en el 2009 por el Ministerio de Educación, con el propósito de digitalizar las aulas españolas. Es difícil determinar su impacto, «entre otras razones, porque muchas comunidades lo interrumpieron o lo aplicaron a medio gas», indica Sergi Jiménez-Martín, profesor de la Universitat Pompeu Fabra (UPF) y autor del estudio Evaluación del Programa Escuela 2.0 a partir de los resultados en Matemáticas de PISA 2012.

ORDENADORES ANTICUADOS / En Catalunya, el programa, que se bautizó con el nombre de eduCat 1x1 y que se suspendió en el 2011, sirvió para que 100.209 estudiantes recibieran un ordenador portátil. Ahora, cinco años después, estos aparatos han quedado anticuados. Eso, por no mencionar los problemas presupuestarios con que se han encontrado muchos centros educativos para renovar, en estos años de crisis, su material tecnológico. «En estos momentos, los colegios que tienen equipamientos nuevos, tienen también asociaciones de padres muy activas e interesadas en estos temas», subraya Jiménez-Martín. En su estudio, se constata que el corto periodo de vigencia del programa eduCat 1x1 apenas tuvo incidencia en las notas de Matemáticas de los estudiantes. «Es posible que aún no haya pasado tiempo suficiente para hacer una valoración, pero también faltó formación del profesorado», insiste.

Según los datos recogidos por este investigador de la UPF, a través del plan ministerial recibieron formación específica en nuevas tecnologías 17.120 docentes catalanes, apenas un 16% de los más de 105.000 profesores que trabajan actualmente en Catalunya.

«La mayoría de los docentes han aprendido sobre tecnología por iniciativa propia, porque les ha interesado y porque, a través de foros y redes sociales, han entrado en contacto con otros profesores», indica Jordi Jubany, profesor y asesor de la Associació de Mestres Rosa Sensat en esta materia.

Es lo que se denomina el entorno personal de aprendizaje, un sistema de aprendizaje «por el que cada día apuestan más maestros, que aprovechan la red para compartir, para dar a conocer sus prácticas, para construir proyectos, para seguir congresos...», señala Jubany.

También en eso quiere incidir la Generalitat, que trabaja en «la definición de las competencias digitales de los profesores». Las tecnologías no se aplican solo para aprender mejor, sino también para mejorar la gestión de los centros y para comunicarse con padres y alumnos. Por eso «hay que dotar a los profesores de competencias digitales», remachaba Jordi Vivancos, responsable de Tecnologías para el Aprenendizaje y el Conocimiento de la Conselleria d'Ensenyament, en un debate organizado recientemente por el Clúster Edutech en Barcelona.