FINANCIACIÓN POLÉMICA

Sanidad aprueba el esperado antiviral contra la hepatitis C

ÀNGELS GALLARDO /BARCELONA

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Los médicos españoles podrán prescribir el antiviral sofosbuvir, indicado para los casos muy graves de hepatitis C, a partir del próximo 1 de noviembre, anunció ayer el Ministerio de Sanidad, tras acordar con el laboratorio productor, Gilead, la adquisición de dosis por un valor de 125 millones de euros anuales. Aunque no trascendió el precio que Sanidad abonará por cada tratamiento con esta sustancia, que se comercializa como Sovaldi, fuentes próximas a la negociación indican que los 60.000 euros que Gilead solicitó en un principio se reducirán a 25.000 por cada enfermo tratado.

Las asociaciones de enfermos de hepatitis C consideraron ayer «totalmente insuficiente» la cantidad de dosis anuales que Sanidad ha decidido adquirir. La administración final del fármaco será costeada por las comunidades autónomas.

El producto, una combinación de antivíricos, se administrará exclusivamente a los enfermos de hepatitis C que sufren cirrosis, han sido trasplantados o se han reinfectado y no toleran los tratamientos convencionales contra esta enfermedad. Para ese colectivo, unas 8.000 personas en España, el acceso a sofosbuvir supone la posibilidad de eliminar una infección hepática para la que ya no disponían de remedio.

Sanidad, no obstante, rebajó ayer de forma ostensible las optimistas expectativas atribuidas al nuevo producto. «Los datos de que disponemos sobre el efecto de Sovaldi son limitados -indicaron-. El medicamento produce la supresión de la carga viral de la hepatitis C, y esto se mantiene varios meses, pero esta respuesta varía mucho en función del estadio y el genotipo de la enfermedad, por lo que no se puede afirmar que se obtengan beneficios indiscutibles en los pacientes más graves». El tratamiento con Sovaldi se dura de 12 a 24 semanas y, según indicaron los estudios realizados, apenas causa efectos secundarios.

En la autorización del sofosbuvir ha sido determinante la presión que han ejercido las asociaciones de enfermos, que no han dejado de criticar la reticencia inicial de Sanidad a incorporar el producto al catálogo de fármacos sujetos a financiación pública. En opinión de los enfermos, esto se debía exclusivamente al elevado precio del tratamiento. En respuesta a esa presión, Sanidad se propuso conseguir un abaratamiento que finalmente ha logrado, si bien anunció la autorización del fármaco puntualizando sus dudas sobre el indudable beneficio que de él se espera.

A diferencia de lo que ocurre con otros fármacos igualmente costosos, Sanidad ha limitado la cantidad de dosis que adquirirá anualmente, algo que ayer indignó a las asociaciones de enfermos. «Con 125 millones de euros se podrá pagar el tratamiento a unos 5.000 enfermos este año, pero son más de 30.000 los que lo necesitarían», afirmó Mario Cortés, presidente de la plataforma de afectados por la hepatitis C. «Seguiremos con nuestra reivindicación para que se ofrezca a todos los enfermos que lo necesiten», dijo Cortés. Sovaldi está autorizado en Luxemburgo, Bélgica y Suiza.