AVERÍA SIN PRECEDENTES

REE pagará 10 millones por el apagón del 2007

Dos operarios limpian la subestación eléctrica del paseo de Maragall destruida por el fuego en julio del 2007.

Dos operarios limpian la subestación eléctrica del paseo de Maragall destruida por el fuego en julio del 2007.

EL PERIÓDICO / BARCELONA

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

La Sala Tercera del Tribunal Supremo ha confirmado en una sentencia hecha pública ayer la multa de 10 millones de euros impuesta por la Generalitat a la empresa Red Eléctrica de España (REE) por los perjuicios causados por el apagón que entre el 23 y el 26 de julio del 2007 dejó sin electricidad a 323.000 usuarios de Barcelona y a numerosos servicios ciudadanos básicos. La Sección Quinta de la Sala Contenciosa del Tribunal Superior de Justícia de Catalunya (TSJC) había fijado ya en ese importe la multa por la avería de una línea y el posterior incendio de la subestación del paseo de Maragall.

Ahora el Tribunal Supremo ha confirmado la sanción que había sido revisada por el TSJC. Este tribunal estimó parcialmente en su día un recurso de la compañía contra la decisión del 2008 de la Conselleria d'Economia por esos mismos hechos, y que establecía el pago de 11 millones.

El alto tribunal catalán avalaba la multa a REE por considerar que la compañía "infringió la obligación legal de garantizar la continuidad del suministro eléctrico, pues siendo titular de la línea de 220 kilovatios incumplió la obligación de mantenerla en las adecuadas condiciones".

Fecsa Endesa

El histórico apagón comenzó en la subestación de Collblanc con la caída de un cable de Fecsa Endesa sobre las instalaciones de REE, lo que derivó en un incendio en la subestación de Maragall, propiedad de esta última. Las empresas se culparon una a otra del apagón, pero la Generalitat acabó multando tanto a REE como a Fecsa Endesa a 11 y 10 millones, respectivamente

El Supremo señala que los dispositivos en los que se produjo el fallo eran propiedad de la empresa y que ya se había alertado del mal estado de las instalaciones que finalmente se colapsaron y cuyo incendio se debió al fallo de las tomas de tierra correspondientes.

En definitiva, el tribunal entiende que "la deficiente situación del sistema de puesta a tierra y de conexión cruzada conocido como 'cross-bonding' de la línea Maragall-Urgell ha sido condición necesaria causante del incendio de la subestación de Maragall".

El suministro a los miles y miles de usuarios del área de Barcelona afectados se restableció de forma gradual pero no la normalidad no volvió del todo hasta cuatro días después, el 26 de julio del 2007. "El incidente afectó a 13 centros de asistencia primaria, a líneas de metro, a los Ferrocarrils de la Generalitat y a la red del tranvía, con interrupciones temporales del servicio, y obligó a movilizar servicios de protección civil, seguridad ciudadana y seguridad vial, con actuaciones de los servicios sociales, penitenciarios y de suministro de agua", dice el fallo.