La reconstrucción de Lorca se enreda por la demora en las ayudas

Cerca de que se cumplan dos años desde los terremotos, Lorca sigue mostrando sus heridas. Aunque decenas de grúas en el horizonte certifican que hay obras que avanzan a buen ritmo, la demora en la acción de las administraciones, las trabas burocráticas e incluso los desacuerdos entre los propios afectados lastran todavía el proceso de reconstrucción de la ciudad murciana.

En un edificio apuntalado de la calle de San Agustín, en el especialmente castigado barrio de La Viña, permanece desde mayo del 2011 la misma pancarta: "Los vecinos de La Viña necesitamos volver a nuestras casas. Soluciones".

Han pasado 22 meses desde ese trágico 11 de mayo en que la tierra tembló en Lorca. Murieron nueve personas, 324 resultaron heridas y los daños se evaluaron en 1.200 millones de euros. Unos 7.000 vecinos todavía no han podido regresar a sus viviendas, y siguen en casa de familiares, de alquiler o en segundas residencias. Muchos de ellos no saben aún en qué condiciones van a recuperar sus hogares, qué ayudas les van a corresponder ni cuándo las recibirán. "Lorca volverá a la normalidad cuando el último vecino desplazado esté de nuevo en su casa", afirma uno de los perjudicados.

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