El Vaticano denuncia una campaña difamatoria contra el Papa en Argentina

El portavoz vaticano, Federico Lombardi, afirmó este viernes que las críticas contra el papa Francisco referentes a su actitud ante la dictadura argentina responden a «una campaña difamatoria bien conocida» de la que responsabilizó a «elementos de la izquierda anticlerical» cuyo objetivo es «atacar a la Iglesia».

Lombardi recordó que los hechos ¿el secuestro y la tortura en 1976 de dos jesuitas a los que supuestamente Bergoglio no protegió¿son «muy antiguos» y que «no hubo nunca una acusación consistente contra él». Bergoglio fue interrogado por la justicia argentina, «pero como persona informada de los hechos, y jamás fue imputado», subrayó el portavoz.

Lombardi agregó que Bergoglio «hizo mucho para proteger a las personas durante la dictadura» y que una vez nombrado arzobispo de Buenos Aires «pidió perdón en nombre de la Iglesia por no haber hecho lo suficiente».

Asimismo, el portavoz de la Santa Sede recordó que el premio Nobel de la Paz Adolfo Pérez Esquivel, «que no suele favorecer a la Iglesia en sus opiniones», ha exculpado al nuevo papa de complicidad con el régimen, y que Franz Jalics, la única de las víctimas del episodio que vive, ha dicho estar «en paz» con Bergoglio.