Emergencia social

Presión a los diputados que rechacen la dación

TONI SUST
BARCELONA

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«Vamos a hacer que cada diputado no pueda moverse impunemente por la zona donde vive y trabaja. Les vamos a señalar día y noche en sus barrios, trabajos y círculos familiares». Estas fueron las palabras que pronunció ayer en Madrid la portavoz de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH), Ada Colau, que anunció que la entidad está cerca de subir un peldaño en su política de acción. Y está dispuesta a sacar los colores, partido por partido, diputado por diputado, a quienes no apoyen sus reclamaciones, que juzga imprescindibles para acabar con la tragedia de los desahucios. Los partidos que no respalden la iniciativa legislativa popular (ILP) por la dación en pago corren el riesgo de ser señalados por la calle. Así lo anunció la PAH ayer en Madrid, en una jornada especial en su trayectoria, el día en que las plataformas acudieron al Congreso a entregar 750.000 firmas en favor de la ILP para que el Congreso debata la dación en pago retroactiva, la paralización de los desahucios y la promoción del alquiler social para los afectados.

Colau anunció medidas más que drásticas. La PAH se marca un calendario a corto plazo. Ha pedido una reunión con todos los grupos del Congreso el 5 de febrero en la sede parlamentaria. En ese encuentro quiere recibir el apoyo a la ILP, por escrito, de los grupos, que tendrán 10 días para contestar. En el caso de los que no respondan o lo hagan negativamente, la PAH mirará con lupa a los diputados de estos grupos. La idea es presionarlos para incentivar el voto individual diferenciado, es decir, que rompan la disciplina de voto de sus partidos.

ACELERAR EL PROCESO / Un elemento clave de las exigencias de la plataforma es acortar los plazos: siguiendo la normativa parlamentaria, la ILP de la dación podría tardar en ser debatida hasta un año. Colau advirtió ayer de que no se puede perder ese tiempo: «Se ha infligido un inmenso dolor, mucha gente está más allá de sus límites por culpa de esta ley [hipotecaria] bárbara y una generación entera está traumatizada. Exigimos un cambio inmediato de la ley. No podemos esperar más, es cuestión de vida o muerte». La PAH quiere que se aproveche el debate del proyecto de ley antidesahucios, y esa será otra condición exigida a los partidos. A partir del 16 de febrero, el colectivo afronta una nueva etapa en la que no solo seguirá deteniendo desahucios sino que intensificará la «recuperación», en palabras de Colau, de edificios que puedan servir para alojar a desahuciados, como han hecho ya en varios casos.

La portavoz afirmó a este diario que los afectados por la hipoteca no contemplan en ningún caso acciones violentas, pero sí señalar con el dedo a quienes en el Congreso no hagan lo necesario para encontrar una solución para los desahuciados y los amenazados con serlo: «Entenderemos que son directamente responsables del sufrimiento de la población».

NO SOLO BUENOS DESEOS / Lo que el colectivo no quiere es que la iniciativa legislativa popular quede en papel mojado, y que los partidos puedan permitirse o bien ignorarla, o bien mostrarse compasivos para después no hacer nada. Es algo relativamente habitual en los encuentros entre entidades sociales y formaciones políticas: sonrisas y amabilidad tras cada reunión. Y solo buenos deseos.

Colau, que en su día ya censuró duramente el código de buenas prácticas para frenar desalojos que acuñó el PP, y que es de aplicación voluntaria por parte de los bancos, cargó ayer de nuevo contra el decreto de moratoria de desahucios, criticado por exigir unos requisitos tan restrictivos que dejan fuera a la gran mayoría de los afectados.