VISITA OFICIAL A CUBA

El papa Francisco insta a los cubanos a servir "a las personas" y no a las ideas

El pontífice ensalza la "vocación de grandeza" del pueblo ante miles de personas reunidas en la plaza de la Revolución de La Habana

El papa Francisco, a su llegada en el pamóvil a la Plaza de la Revolución de La Habana para oficiar su primera misa en Cuba.

El papa Francisco, a su llegada en el pamóvil a la Plaza de la Revolución de La Habana para oficiar su primera misa en Cuba. / jma

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El papa Francisco ha instado este domingo a los cubanos a servir "a las personas" y no a las "ideas" y ha insistido en que la importancia de las naciones se mide en cómo atienden a las necesidades de los más desfavorecidos. Así lo ha expresado en su homilía en una multitudinaria misa, la primera que celebra en el país.

En la Plaza de la Revolución de La Habana, adonde llegó este sábado, el pontífice ha afirmado que el pueblo cubano tiene "vocación de grandeza" y que debe cuidarla, pero especialmente mediante el servicio a los más frágiles.

"La importancia de un pueblo, de una nación, la importancia de una persona siempre se basa en cómo sirve a la fragilidad de sus hermanos", ha añadido el papa, que ha dedicado su homilía a recordar a los cristianos que "todos estamos invitados (...) a hacernos cargo los unos de los otros por amor".

El papa ha defendido el concepto del "servicio" a los demás pero ha alertado contra la tentación de querer beneficiar "a los 'míos' en nombre de lo 'nuestro'", porque, ha señalado, eso puede generar una "dinámica de exclusión".

Servir a los frágiles

"El servicio nunca es ideológico, ya que no se sirve a ideas, sino que se sirve a las personas", ha continuado el pontífice en esta misa en la simbólica Plaza de la Revolución, donde también las oficiaron en sus precedentes visitas los papas Juan Pablo II (1998) y Benedicto XVI (2012).

También ha recordado que "el santo pueblo fiel de Dios que camina en Cuba es un pueblo que tiene gusto por la fiesta, por la amistad, por las cosas bellas" y ha agregado que también "tiene heridas (...) pero que sabe estar con los brazos abiertos. "Hoy los invito a que cuiden esa vocación, a que cuiden estos dones que Dios les ha regalado, pero especialmente quiero invitarlos a que cuiden y sirvan, de modo especial, a la fragilidad de sus hermanos".

"No los descuiden por proyectos que puedan resultar seductores, pero que se desentienden del rostro del que está a su lado", ha advertido el papa en la ceremonia, a la que asistió el presidente cubano, Raúl Castro, y la presidenta de Argentina, Cristina Fernández.

"Servir significa, en gran parte, cuidar la fragilidad. Cuidar a los frágiles de nuestras familias, de nuestra sociedad, de nuestro pueblo", dijo el papa.

El pontífice celebró la eucaristía ante miles de cubanos que le esperaban desde primeras horas de la mañana y entre quienes circuló para saludarles más de cerca a bordo de un papamóvil abierto de fabricación cubana.