normativa pionera

El País Vasco regulará el cultivo y el consumo de cannabis

ANA GARBATI BILBAO

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Si se cumplen las previsiones del Gobierno vasco, el cultivo, la venta y el consumo «responsables» de cannabis por parte de las personas mayores de edad podría ser legal en Euskadi el próximo verano. El departamento de Sanidad ultima los términos de la regulación, que se integrará en la ley de adicciones que el Ejecutivo de Patxi López prevé enviar al Parlamento en los primeros meses del 2012.

Aunque todo dependerá de la celeridad de los trámites del legislativo vasco par dar el visto bueno a la norma, Euskadi podría ser la primera comunidad en España que ponga fin al vacío legal en torno al consumo de cannabis. El viceconsejero de Sanidad, Jesús María Fernández, defendió ayer que es mucho mejor «ordenar que prohibir» cuando se trata de «conductas ya consolidadas socialmente».

En clara sintonía con las posiciones que vienen defendiendo las asociaciones de consumidores, los responsables de la sanidad vasca interpretan que las normas que se basan en la prohibición lo que hacen es fomentar «la clandestinidad, la delincuencia, los mercados negros y las injusticias en los países productores». Por eso han optado por acabar con la inseguridad jurídica en la que se desenvuelven quienes han optado por el cultivo para el autoconsumo.

CONDICIONES / «La gente se hace responsable gracias a la educación, a la información y a que se cuente con todos los elementos de autorregulación que se sobreentienden», dijo el consejero de Sanidad, Rafael Bengoa, al respaldar la iniciativa.

El departamento cuenta con que la norma no será fácil. Al contrario, los portavoces admitieron que la elaboración será «compleja» desde el punto de vista de la técnica jurídica. Anunciaron que el criterio general será dejar «un cierto espacio a la autonomía personal» siempre que se cumplan dos condiciones. La primera será que la persona que cultive y consuma disponga de una información completa sobre las «consecuencias» de lo que hace; la segunda será que respete «de manera absoluta» el derecho a la salud de los demás.