La Generalitat requisa 13 perros y recomienda la vacuna contra la rabia a 20 personas

La Agència de Salut Pública de Catalunya (ASPCAT) ha entrevistado a 27 personas y ha indicado a 20 ellas la profilaxis contra la rabia. Asimismo, han decomisado un total de 13 perros que estuvieron en contracto con el pítbull que el 1 de mayo atacó a cinco personas en Toledo. La Generalitat ha activado los protocolos correspondientes ante el brote de rabia que mantiene la alerta 1 en España por el perro agresor cuyos dueños tenían fijada su residencia en Montcada i Reixac y desde principios de este año estuvieron en diferentes puntos de Girona y Huesca.

El departamento de Agricultura, Ramaderia, Pesca, Alimentació i Medi Natural ha informado este miércoles en un comunicado que se ha pedido la colaboración de los ayuntamientos afectados para que los propietarios de perros, gatos, hurones y otros animales de compañía sigan los protocolos estrictos de vacunación. También detalla que se ha realizado un estudio epidemiológico del caso, tanto desde el punto de vista animal como de la prevención para las personas. En este sentido advierten que la información se revisará "en función de los resultados del estudio".

Información a los veterinarios

El Col.legi de Veterinaris de Barcelona está informando a sus colegiados y a las clínicas veterinarias sobre la situación para que recomienden a sus clientes la vacuna contra la rabia, que no es obligatoria en Catalunya si no se trata de razas peligrosas. Algunos veterinarios se han extrañado de que la Generalitat no haya ampliado más el perímetro de las zonas restrictivas que ha establecido la Generalitat en las poblaciones de Montcada i Reixac, Piera, Banyoles y Porqueres.

Se desconoce el censo real de las mascotas existentes en los cuatro municipios afectados, aunque solo en Montcada son casi 2.000. El presidente el Col.legi Oficial de Veterinaris de Barcelona, Josep Antoni Gómez, ha informado que han ampliado la recomendación de la vacunación a los núcleos colindantes con las zonas restrictivas fijadas por la Generalitat. "En estos casos más vale prevenir por exceso", advierte Gómez.

El Gobierno español declaró el nivel 1 de alerta por la rabia el pasado jueves y comunicaron la situación a la Comisión Europea y a la Organización Mundial de Sanidad Animal. El Gobierno de Castilla-La Mancha ha establecido la vacunación obligatoria o la revacunación de los animales de compañía en un total de 56 poblaciones.

Catalunya, Galicia y el País Vasco son las únicas comunidades en las que no es obligatorio vacunar a las mascotas contra la rabia. "Es una decisión de la Administración con la que nosotros nunca hemos estado de acuerdo", ha aclarado el presidente del Col.legi de Veterinaris de Barcelona.

Cuatro áreas restrignidas

Un brote de rabia originada por el pítbull que el 1 de junio atacó a cinco personas en Toledo, tres de ellas niños, ha originado la orden de la Generalitat de vacunar a todos los perros, gatos, hurones y otros animales de compañía de las áreas de restricción establecidas en Montcada i Reixac (Vallès Occidental), Piera (Anoia) y Porqueres y Banyoles (Pla de l¿Estany). La resolución obliga a vacunar en un plazo máximo de 15 días a todos los animales de más de tres meses de edad y a revacunar a los que ya lo estuvieran. 

La medida adoptada por la 'conselleria' de Agricultura, Ramaderia, Pesca, Alimentació i Medi Natural, que dirige el 'conseller' Josep Maria Pelegrí, y publicada en el Diari Oficial de la Generalitat (DOGC) se debe a que se detectó la rabia en el el perro agresor que fue abatido en Toledo. Su dueño tenía fijada su residencia en Montcada i Reixac, pero desde principios de este año también había tenido estancias en una casa ocupada de la zona de Banyoles y en otros municipios de Catalunya y de Aragón, antes de desplazarse a Argés (Toledo).

El dueño del animal informó que se le había escapado días antes de aparecer en Toledo. Tras la agresión, el propietario fue detenido e imputado por las agresiones del pítbull, aunque después fue puesto en libertad con cargos. 

Según han informado diferentes organismos, el perro agresor pudo contraer la rabia durante los varios meses que el año pasado permaneció en Marruecos con sus dueños. El mismo perro había sido vacunado por un veterinario de Calafell (Baix Penedès) el 1 de diciembre del 2012 contra la hepatitis, bromo, leptospirosis, parvovirosis, aunque todo apunta a que no generó anticuerpos.