PASO ATRÁS DE UNA TEORÍA PSEUDOCIENTÍFICA

El mayor grupo dedicado a 'curar' gais de EEUU cierra y pide perdón

Activistas contra la discriminación de los homosexuales, en un reciente festival en Salt Lake City (Utah).

Activistas contra la discriminación de los homosexuales, en un reciente festival en Salt Lake City (Utah).

RICARDO MIR DE FRANCIA
WASHINGTON

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Decía ser la mayor y más antigua organización cristiana de EEUU dedicada a lidiar con la fe y la homosexualidad. Una entidad consagrada desde hace 37 años a asesorar a personas homosexuales que querían dejar de serlo o, en sus propias palabras, a «ayudar» a los gais y lesbianas que «buscan liberarse de la atracción indeseada hacia personas del mismo sexo». Pero este miércoles, en una disculpa pública lanzada por su presidente, Exodus International reconoció que sus teorías y métodos son una patraña y pidió disculpas por el «daño» y el «dolor» que han ocasionado sus terapias. Un día después, la organización anunció que cierra sus puertas.

La disculpa partió de Alan Chambers, el director de Exodus, organización que tenía hasta ahora su sede en Orlando (Florida), además de varias sucursales alrededor del mundo. «Siento el dolor y el daño que muchos de vosotros habéis experimentado. Siento que algunos de vosotros hayáis tenido que soportar durante años la vergüenza y la culpa al ver que vuestras atracciones no cambiaban», decía la misiva publicada en la web de Exodus. Hasta hace poco tiempo, Chambers se presentaba como una de «las miles de personas» que había logrado revertir sus tendencias homosexuales, pero en la carta admitió que estuvo ocultando sus verdaderas inclinaciones «por la tremenda vergüenza» que le causaban, esperando que con el tiempo desaparecieran.

«Los días de sentirme avergonzado por ser humano en este sentido han pasado. Me siento libre por aceptarme a mí mismo tal como soy y como lo hace mi mujer y mi familia». Para tratar de «curar» la homosexualidad, Exodus recurría a la oración y a la llamada terapia reparadora, desautorizada desde hace años por la Asociación de Psiquiatría de EEUU. Esta pseudociencia considera que las inclinaciones hacia el mismo sexo están ancladas en problemas emocionales generados en la infancia o en abusos sexuales sufridos durante la niñez.

«Es una victoria tremenda», dice Wayne Bassin, director ejecutivo de Truth Winds Out, una organización dedicada a «luchar contra las mentiras antigais y el mito del exgay». «La credibilidad de estos programas ha quedado hecha añicos. Chambers ha extendido una larga sombra sobre todos aquellos que dicen que estas terapias funcionan. No lo hacen. Lo único que consiguen es destruir familias y arruinar vidas abocando a muchos a la depresión y, en algunos casos, al suicidio», añade.

RESIDUALES / A medida que la homosexualidad ha ido siendo aceptada por la opinión pública de EEUU, estas organizaciones han ido ocupando un espacio cada vez más residual. Pero como dijo ayer el Human Rights Council, «sigue habiendo organizaciones ahí fuera que perpetúan los mismos mitos». Una de las más conocidas es la «clínica cristiana» del marido de Michele Bachmann, candidata republicana a la presidencia en las últimas elecciones.

Algunos estados están tomando la iniciativa para legislar en contra de estos tratamientos, condenados por las grandes asociaciones médicas y psiquiátricas del país. California fue el primero en prohibir el año pasado las terapias destinadas a revertir la homosexualidad en los jóvenes. Y se espera que Nueva Jersey vote un proyecto de ley similar antes de que acabe el mes.