DECISIÓN HISTÓRICA POR LA MALA CALIDAD DEL AIRE

Madrid prohíbe la circulación de la mitad de los coches por contaminación

OLGA PEREDA / MADRID

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Por primera vez en España, una gran ciudad pone en marcha una drástica medida para restringir el tráfico: prohibir la circulación de determinados vehículos. Así lo ha decidido el Ayuntamiento de Madrid, en manos de Ahora Madrid, que tras una reunión de gabinete ha decretado el nivel tres del protocolo por alta contaminación. Eso significa que los días pares solo podrán circular por el centro de la ciudad -interior de la M-30- los coches con matrícula par o terminada en cero. Los días impares podrán hacerlo solo los impares. El jueves, día 29, ningún coche con matrícula par (o acabada en cero) podrá circular. Si lo hace se arriesga a una multa de 90 euros (45 si se opta por el pronto pago).

VEHÍCULOS EXENTOS

La histórica medida -que empieza a las 6.30 horas y termina a las 21.00- tiene excepciones. Sí podrán recorrer las calles de la ciudad, con independencia de la matrícula, los taxis, las motos, los vehículos de cero emisiones, así como los coches con tres o más ocupantes o aquellos cuyo conductor tiene movilidad reducida. La prohibición afecta, de momento, al jueves. El consistorio, liderado por Manuela Carmena, decidirá cada día, y en función de los niveles de contaminación, si se aplica durante las próximas jornadas. Todo depende de si baja la polución, algo a lo que ayudaría bastante el viento o la lluvia. Sin embargo, no se prevén cambios meteorológicos hasta el próximo lunes. De momento se sigue con falta de lluvia (12 días sin precipitaciones en Madrid) y temperaturas nada invernales (unos 13 grados a mediodía).

"MEDIDA IDEOLÓGICA" PARA EL PP

La resolución del equipo de Carmena ha provocado la indignación de los concejales del PP, que la han calificado de “decisión ideológica”, a pesar de que el protocolo para luchar contra la contaminación fue aprobado en la etapa de Ana Botella (PP) al frente del ayuntamiento. La actual alcaldesa, eso sí, modificó el texto y lo endureció para que la prohibición de circulación se decretara con niveles de polución más bajos que los previstos en la etapa anterior. En cualquier caso, para el PP se trata de una medida que “provoca problemas a gente que no tiene culpa”, en palabras del portavoz parlamentario, Rafael Hernando. Mientras, consciente de los expedientes que tiene Madrid por parte de la UE por superar los límites de contaminación, el PSOE de Madrid justificó la medida y Ciudadanos replicó que “no todo en la vida son prohibiciones”.

Los madrileños acogieron la decisión entre la sorpresa, la indignación y la resignación. Y eso que hace un mes ya hubo un aviso. En noviembre, el consistorio barajó la posibilidad de activar el nivel tres del protocolo para luchar contra la contaminación (lo cual lleva aparejada la restricción al tráfico) pero finalmente se descartó. Eso sí, a última hora y con masivas críticas por parte de los ciudadanos, que exigieron más celeridad a la hora de anunciar la decisión. El ayuntamiento tomó nota y ha lanzado hoy la noticia al mediodía. Preguntados por los reporteros de las televisiones, los conductores tenían opiniones para todos los gustos. Desde el consabido “habrá que aguantarse y coger el transporte público” al “me da igual si me multan porque yo voy a venir con mi coche”.

NOCHEVIEJA Y AÑO NUEVO

El ayuntamiento ha dejado claro que las restricciones -que se suman a la de aparcar en las zonas reguladas para los no residentes y limitar la velocidad a 70 kilómetros por hora en la M-30 y otros accesos a la ciudad- tienen “excepciones”. Por ejemplo, ¿qué pasa si eres turista y tu coche tiene matrícula par? En principio, quedarían exentos. “No se trata de fastidiar a nadie”, insiste la portavoz del consistorio, Rita Maestre. Con vistas a Nochevieja y Año Nuevo (con miles de desplazamientos por la ciudad), los responsables municipales prefieren "no adelantar acontecimientos" e ir tomando medidas "poco a poco". "No hay que alarmar a nadie”.

Conscientes de lo impopular de la iniciativa, los ecologistas han aplaudido la medida municipal para zanjar un grave problema provocado, en parte, por las partículas que dejan ir los tubos de escape del millón de vehículos que cada día entran en Madrid. Menos conscientes con el medio ambiente, los comerciantes del centro de la ciudad han manifestado su preocupación por el posible bajón en las compras navideñas.

{"zeta-legacy-despiece-horizontal":{"title":"Soluciones de pago para no aparcar","text":"Las restricciones al tr\u00e1fico en Madrid, concretamente la prohibici\u00f3n para los no residentes de aparcar en las zonas reguladas, est\u00e1n provocando la aparici\u00f3n de nuevas empresas. Una de ellas, activa en los barrios m\u00e1s c\u00e9ntricos y m\u00e1s congestionados de la ciudad, como Malasa\u00f1a y Justicia, tiene una plantilla de conductores que se desplazan en patinete. Una vez llegan al veh\u00edculo del cliente, pliegan su patinete y conducen el coche a un aparcamiento privado y vigilado. Cuando el cliente necesita\u00a0otra vez su coche de vuelta, la empresa se lo acerca a la direcci\u00f3n en la que est\u00e9, aunque no sea la inicial. El servicio -activo a trav\u00e9s de una aplicaci\u00f3n en el m\u00f3vil- cuesta cinco euros la hora y la firma, Valeet, ya tiene planes para extenderlo a Barcelona en el 2017."}}