Una tradición en el alambre

Los lotes para empresas capean la crisis con un cambio de modelo

Cestas y lotes de Navidad en una de las salas habilitadas por uno de los principales distribuidores de estos productos.

Cestas y lotes de Navidad en una de las salas habilitadas por uno de los principales distribuidores de estos productos.

RAFA JULVE
BARCELONA

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

las empresas que elaboran lotes de Navidad no esperaban que las cifras de ventas de estas fiestas fueran tan buenas. Cuando decimos buenas queremos decir que en plena crisis, cuando muy pocos sectores se salvan del sufrimiento presupuestario, este negocio ha logrado mantenerse e incluso crecer levemente tras la debacle del 2008. Por supuesto, algunas firmas ya se vieron obligadas a cerrar hace meses y otras siguen sin remontar, «pero muchas han agudizado el ingenio y han ampliado el surtido para incrementar los beneficios», asegura la secretaria de la Asociación de Elaboradores de Lotes y Cestas de Navidad de Valencia, Alicante y Castellón (Aslovac), Elena Alarcón. El número de productos comercializados por esta organización, una de las más potentes de España, ha sido estas semanas un 5% superior al de las Navidades del 2009 y ha llegado a los 2,1 millones de unidades.

Las grandes cajas con polvorones, mazapanes, piña en almíbar y licores se siguen incluyendo en la oferta, «pero cada vez tienen menos salida», afirma Alarcón. Ahora se lleva más regalar menos productos pero de mayor calidad, «como un buen cava, un buen vino y unfoie». Las grandes empresas son las que más han suprimido los detalles para empleados, clientes y periodistas. «Las pymes son las que mantienen el sector», dice la dirigente de Aslovac.

JAMÓN SERRANO POR IBÉRICO / Uno de los regalos empresariales estrella, el jamón, también ha podido capear la crisis y lograr unos ingresos nada espectaculares pero sí correctos en estos tiempos que corren. «El remanente que quedaba en las bodegas ha permitido ajustar los precios y ayudar a los empresarios a seguir optando por este tipo de obsequio», comenta José Ramón Godoy, gerente de la Fundación del Jamón Serrano. Muchos compradores, no obstante, han sustituido el jamón ibérico por la paletilla o, sobre todo, por el jamón serrano para ahorrar más. De los cinco millones de jamones serranos que se consumen en España en Navidad, entre medio millón y un millón son regalos de empresas.

Otro de los grandes distribuidores, El Corte Inglés, también ha registrado un volumen de ventas similar al del 2009, y lo ha conseguido «gracias a la fidelidad de los clientes, a los precios asequibles y a la diversificación de la oferta», explica un portavoz de la empresa. Las tarjetas regalo han vuelto a triunfar entre las compañías que utilizan este aguinaldo en especie como incentivo.

Quien se ha dado un batacazo son las firmas dedicadas a los regalos publicitarios: un 30% menos de ventas y más baratas. «El año pasado vendimos muchas alfombrillas de ordenador con el logo del cliente y otros detalles más elaborados. Este año, lo que más nos han pedido son bolis, que tienen muy poco coste», admite Antonio Gutiérrez, gerente de Hospigestión, que elabora este tipo de productos a través de su división HGregalosdeempresas.com.