Los incendios han quemado 1.000 hectáreas en Ariège, en el Pirineo francés

Los diversos focos de incendios que se han sucedido desde el 17 de diciembre en las montañas del departamento de Ariège, en los Pirineos franceses, favorecidos por una fuerte sequía y un tiempo anormalmente caluroso, habían quemado hasta hoy un millar de hectáreas. La jefa del gabinete de la prefectura de Ariège explicó a Efe que todavía quedan "algunos puntos activos", en concreto tres focos -uno de ellos apagado, que está siendo vigilado-, e insistió en que "la situación está en fase de mejora". El fuego estaba localizado en la parte alta del valle del Ariège y en Couserans, en una zona de altitud -cercana a las fronteras de España y Andorra, aunque no en una proximidad inmediata- donde no hay viviendas ni tampoco ha sufrido daño el ganado, precisó la portavoz de la delegación del Gobierno. Sobre el origen de los incendios, reconoció que no tienen "ningún elemento tangible" para determinar si detrás están trabajos agrícolas de quema de restos vegetales. En cualquier caso, la delegada del Gobierno en el departamento, Marie Lajus, prolongó hoy hasta el final de la semana la prohibición de proceder a ese tipo de quemas, dado que hasta el domingo no se prevén precipitaciones significativas. Marie Lajus había emitido ayer un primer decreto para prohibir durante dos días esas prácticas a la vista de los 93 inicios de fuego detectados en los últimos 15 días. Hasta 300 bomberos han estado movilizados en los últimos días en la extinción de los fuegos, aunque su número se había ido reduciendo últimamente: ayer habían sido entre 80 y 100. Los bomberos han trabajado con camiones y otros vehículos y han recibido el apoyo de un helicóptero bombardero de agua.