LA POSICIÓN DE LOS PROFESIONALES CATALANES

Los colegios de médicos echarán a los detractores de la vacunación

FERRAN COSCULLUELA / BARCELONA

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El 'conseller' de Salut, Boi Ruiz, avaló ayer la posición del Col·legi de Metges de Barcelona, cuyo presidente, Jaume Padrós, ha abogado por castigar con la suspensión a los facultativos que promuevan el discurso antivacunas. El 'conseller' reconoció en la localidad francesa de Prada de Conflent que ve con buenos ojos la propuesta y recordó que se trata de una competencia de los colegios profesionales. En todo caso, se mostró convencido de que, si se aplica, se hará de forma «estricta y cuidadosa».

Jaume Sellarès, vicepresidente del colegio barcelonés, recordó que estos organismos profesionales son entidades de derecho público reconocidos por la Constitución, y que entre sus cometidos tienen la obligación de velar por el cumplimiento del código deontológico, en el que se regula la buena praxis profesional. «El código deontológico, que en Catalunya es común para los cuatro colegios provincialess, garantiza que la acción de un médico nunca será perjudical para los ciudadanos, y que los profesionales tienen la obligación de proponer a los pacientes la mejor alternativa terapéutica en cada momento», añadió.

El incumplimiento del código deontológico implica unas sanciones en función de la gravedad de la falta cometida y, en el caso de las vacunas, el colegio barcelonés considera que «no hay duda ni discusión posible sobre su demostrada eficacia» en la lucha contra enfermedades. «Es evidente que no recomendar la vacunación es una mala praxis», afirmó Sellarès, que aseguró que el colegio «abrirá expediente y suspenderá de la colegiación» (lo que implica la imposibilidad de ejercer ) a cualquier profesional que defienda esa tesis. «Nosotros no podemos poner policías para vigilar a todos los médicos, pero si nos llega una denuncia de un ciudadano o de la Administración, actuaremos en consecuencia, como hemos hecho en otros casos», recordó.

DESAFORTUNADA FORCADES

Respecto a algunos colegiados que se han mostrado críticos con las vacunas, como la monja Teresa Forcades o el doctor Xavier Uriarte, Sellarès calificó de «desafortunadas» las declaraciones de la religiosa, pero admitió que el colegio ha decidido no sancionarla porque considera que no se ha pronunciado contra la vacunación.

En el caso de Uriarte, el presidente del Col·legi de Metges de Girona, Josep Vilaplana, explicó que tampoco se le castigará porque el autor de 'Los peligros de las vacunas' ha matizado que no está en contra de la inmunización, sino que exige una información más transparente sobre esos medicamentos. «Le hemos recordado que recomendar la no vacunación vulnera el código deontológico», justificó Vilaplana.