Las áreas de servicio de Catalunya mejoran pero flojean en seguridad

Las áreas de servicio en las autopistas catalanas, estos días repletas de turistas de media Europa, han dejado de ser lugares vetustos e incluso desagradables tras la mejora que en casi todos los aspectos han experimentado en los últimos 10 años. En un largo recorrido por cada una de estas 25 áreas (que en realidad son 49 porque todas, excepto la de Vallvidrera, abarcan los dos sentidos de la circulación), EL PERIÓDICO ha constatado que, sin llegar a ser paraísos de la comodidad, todas han mejorado en accesibilidad, comodidad, señalización, limpieza, servicios y oferta gastronómica. Lo que menos ha cambiado son las zonas de aparcamiento, por lo que la seguridad de los peatones sigue siendo mejorable, aunque (igual que los otros parámetros) varía mucho de una a otra.

SERVICIOS PARA LA FAMILIA

Implantación total de los 'cuartos de bebé'

Las áreas de servicio, en especial las que están en la AP-7 desde el Baix Ebre hasta La Jonquera, son territorio de miles de familias que viajan con niños durante las fechas vacacionales. Para la atención a los bebés hay más facilidades que antes. Las áreas sin una habitación específica para cambiar los pañales son excepción (Penedès y Montblanc) y en casi todas tiene un nombre (El cuarto del peque) y un aspecto agradable.

En el exterior, cada vez más áreas tienen un pequeño parque infantil con juegos básicos ¿columpios y tobogán¿ y alguna ofrece incluso futbolín y billar (Empordà, dirección sur). Las zonas depicnic, con mesas y bancos, se han ido ampliando o se han incorporado donde no las había (en la AP-2 hacia Lleida). Su ubicación no siempre es idónea, pero en algún caso (Gironès, hacia el sur) es envidiable. También hay cada vez más lavapiés, muy usados por los musulmanes antes de rezar.

HIGIENE Y LIMPIEZA

Suciedad en las zonas de más afluencia

No es aún una situación perfecta, ni mucho menos, pero tanto en el exterior como en el interior parecen dedicarse más esfuerzos a la limpieza. Aun así, es posible hallar áreas con papeleras desbordadas (Montseny, norte) o con demasiada suciedad en los aparcamientos (el Mèdol), fruto en parte de la alta afluencia de viajeros. El Mèdol, en Tarragona, es precisamente el área más concurrida de todas. También las hay muy tranquilas (Gavà, C-32), donde la suciedad es fruto del abandono. Dentro, todas reflejan a la entrada las horas concretas en que se ha realizado la limpieza de los lavabos. Esa limpieza, en algunas, se hace cada media hora (Vallès) o cada una o dos horas, pero en las más tranquilas a veces es suficiente con dos turnos al día.

LAS INDICACIONES

Las señales que causan confusión

Es difícil perderse en la parte interior de las áreas de servicio (restaurante, tienda y otros servicios). Todo está bien indicado: lavabos, tienda, restaurante. En el exterior, sin embargo, puede haber todavía confusión. En la autopista, donde se anuncia incluso el horario de apertura (en la gran mayoría es durante las 24 horas del día, aunque hay unas cuantas que cierran sus servicios desde las 22.00 o 23.00 horas hasta las 6.00 o 7.00 del día siguiente, como Montcada, Gavà, Maresme, Alt Camp y Les Garrigues), algunos rótulos no indican bien qué se cierra: ¿el restaurante solo o la gasolinera y su tienda también? Desde el coche, a veces, también es difícil ver por dónde circular por la jungla de asfalto de las áreas. Existen numerosos y confusos desvíos a la gasolinera o al párking del restaurante. Las señales, en muchas casos, solo se ven en el último momento. También se podría indicar mejor el acceso a las zonas depicnic. Demasiadas veces se ve circular por las áreas a automovilistas confusos, conduciendo incluso en dirección contraria sin que ellos mismos se den cuenta.

LA ACCESIBILIDAD

Sin obstáculos, pero con puertas 'duras'

Pese a que en algunas zonas se deben superar rampas con un desnivel considerable (Selva, La Jonquera) o que solo hay escaleras mecánicas de subida y no de bajada (Lleida, La Jonquera), prácticamente todas son accesibles para personas discapacitadas y en todas hay lavabos adaptados. También se reservan plazas de párking especiales en las zonas más cercanas a la entrada de las instalaciones, sin bordillos ni escaleras por superar, aunque la mayoría tienen el inconveniente de no contar con puertas corredizas automáticas. Las mejoras en este aspecto, no obstante, son evidentes respecto a hace dos décadas. Entonces, en el folleto de las autopistas de la concesionaria Acesa y sus áreas de servicio no había ninguna accesible en sillas de ruedas. O, al menos, no se indicaba.

LA SEGURIDAD

Cámaras, poca policía y travesías peligrosas

La seguridad es todavía una asignatura pendiente en casi todas las áreas de servicio, tanto en el aspecto de la seguridad vial como en la seguridad de las personas y sus pertenencias. Las áreas de servicio y las de descanso siempre han sido terrenos de trabajo fructíferos para los delincuentes. Ayuda la enorme afluencia de turistas en la época estival, muchas veces despistados o cansados, y, sobre todo, llenos de cosas de valor. Prácticamente todas las áreas disponen ahora de cámaras de videovigilancia como método disuasorio y también para poder identificar a los ladrones. Aun así, se siguen produciendo numerosos robos. En este sentido, en las dos jornadas de 10 horas que necesitó EL PERIÓDICO para visitar todas las instalaciones, solo en dos ocasiones, o sea en dos únicas áreas, se pudo ver una patrulla de los Mossos d'Esquadra. La seguridad vial es otro punto a mejorar. Todas las áreas tienen ahora amplios pasos de cebra, pero el problema en algunas (La Selva, La Jonquera) es que la zona de aparcamiento está separada de la de servicios por el vial que conduce de la autopista a la gasolinera, por lo que hay que cruzarla cuando muchos coches apenas ralentizan la velocidad.

LA OFERTA GASTRONÓMICA

Nuevos menús y un amplio bufet

Cuando en el 2001 el RACC y otros 11 clubs europeos de automovilistas analizaron 95 áreas de servicio en todo el continente, las españolas suspendían en higiene y obtuvieron notas bajas en la señalización y la seguridad vial. Sin embargo, mejoraron su nota global gracias a la oferta gastronómica, que era mejor y más barata que en la mayoría de los países. Sobre los precios: comer en un área de servicio o comprar un refresco o una botella de agua siempre ha sido caro. Este año, sin embargo, gran parte de estas áreas (las que funcionan bajo el nombre de La Pausa y Ars) han introducido un menú de 9,95 euros. También hay menús de 15 o 17 euros e incluso uno depicnica 5,95. En los platos que componen el bufet los precios pueden variar desde 6,95 para un plato de pasta a 14,94 por un filete de ternera o una espalda de cordero. Los bocadillos van de 3,95 a 5,95 euros (este último con embutido ibérico), un café cuesta 1,40 y una botella pequeña de agua 1,70. Son precios medios, que, por otra parte, siguen siendo más bajos que los que suelen haber en áreas de Gran Bretaña, Holanda, Alemania y Francia.

La presentación y preparación de la comida también ha mejorado en estos 10 años, pese a la ya buena nota del 2001. Muchos restaurantes de las áreas catalanas tienen una plancha para preparar platos al instante, aunque en general se imponen los bufets, con bastante variedad de platos preparados el mismo día. También se están popularizando cada vez más los bufets de ensaladas.