Guantazos en el pleno

Una panorámica de  Castelló de Farfanya.

Una panorámica de Castelló de Farfanya. / periodico

EVA TABOADA / LLEIDA

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Aunque ya se preveía de antemano que podía ser una sesión polémica, sobre todo después de la intoxicación que sufrieron 10 personas por una fumigación en las piscinas municipales, nadie en Castelló de Farfanya (Noguera) imaginaba este miércoles que el pleno del ayuntamiento podría acabar a puñetazos, insultos y empujones. La sesión, celebrada al atardecer, empezó ya con mucha expectación, dado que los vecinos esperaban que la alcaldesa de ERC, Cristina Lafay, diera explicaciones sobre la razón por la que no se cerró al público el recinto deportivo durante las labores de desinfectación.

La tensión se desató cuando un grupo de vecinos empezó a increpar a la alcaldesa, que ocupa el cargo desde la semana pasada. Momentos después de iniciarse la discusión, Miquel M. A., marido de la regidora, se sentó junto al hombre que lideraba la disputa y sin mediar palabra, en un momento inesperado, lo tiró al suelo. Cuando el agredido, Geroni Cornet, se intentó levantar, el esposo de Lafay volvió a empujarlo, según ha explicado a este diario Alba Cornet, hija del agredido y responsable de la gestión del bar de las piscinas municipales este verano.

Como minutos antes de la pelea la alcaldesa había avisado ya a los Mossos d'Esquadra, estos tuvieron que intervenir para detener el rifirrafe y el pleno quedó suspendido.

El agredido fue atendido en el ambulatorio de la localidad por diversas lesiones y ha presentado denuncia de los hechos ante los Mossos d'Esquadra. "Estamos estudiando con el abogado presentar una denuncia penal", ha explicado Geroni Cornet, que ha añadido que "no se puede hablar de pelea sino de agresión". "Yo no pude ni defenderme", ha agregado.

DIMISIÓN DE LA ALCALDESA

Los concejales de la oposición municipal, de Convergència Democràtica, han anunciado también que pedirán la dimisión voluntaria o forzosa de la alcaldesa. Según la concejala convergente Noemí Almizara la responsabilidad de la mandataria local empieza ya en el momento en que no hizo cerrar el bar de la piscina. "Es intolerable, ya que el establecimiento se encuentra dentro de un perímetro de seguridad".

Se da la circunstancia, además, de que Cristina Lafay ha hecho esta semanas unas polémicas declaraciones sobre la fumigación en una emisora de radio en las que explicaba que los intoxicados "se habían dejado intoxicar", ya que el ayuntamiento había avisado de la fumigación. El día del pleno, no obstante, la edila rectificó estas declaraciones.

La polémica fumigación se realizó el martes, pasadas las ocho de la tarde, con las piscinas cerradas, pero con el bar todavía abierto. Diez personas que se encontraban en el lugar resultaron intoxicadas por los productos utilizados durante la fumigación. Al lugar de los hechos acudieron dos ambulancias. Uno de los afectados, con insuficiencia respiratoria, fue trasladado al ambulatorio de Balaguer, la capital comarcal, mientras que, según ha explicado la responsable del bar, la Conselleria de Salut está estudiando los hechos.