CRISIS SANITARIA INTERNACIONAL

El Gobierno inicia la repatriación de otro religioso que sufre ébola

Miguel García Viejo meses atrás, junto a un enfermo en el Hospital San Juan de Dios de Lunsar (Sierra Leona).

Miguel García Viejo meses atrás, junto a un enfermo en el Hospital San Juan de Dios de Lunsar (Sierra Leona).

ÀNGELS GALLARDO / BARCELONA

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Un Airbus del Ejército español inició anoche el traslado a España desde Freetown, en Sierra Leona, del religioso Manuel García Viejo, de 69 años, a quien le ha sido diagnoticada la infección por el virus del ébola. El enfermo solicitó a la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios (OHSJD), a la que pertenece, su repatriación a España, un deseo que la institución religiosa expuso de inmediato al Gobierno. Los ministerios de Sanidad, Exteriores y Cooperación y Defensa activaron ayer el dispositivo de evacuación que ya emplearon el pasado 7 de agosto para repatriar al religioso Miguel Pajares, que enfermó de ébola en Monrovia (Liberia) y falleció en Madrid cinco días después. Manuel García Viejo, director médico del Hospital San Juan de Dios de la ciudad de Lunsar, en Sierra Leona, viajará en un avión medicalizado de las Fuerzas Aéreas españolas, en concreto, un Airbus 310 del Ejército. A su llegada al aeródromo de Torrejón, el enfermo será recibido por personal del servicio de Sanidad Exterior, que lo trasladará al complejo hospitalario La Paz-Carlos III, donde quedará ingresado en una unidad de aislamiento especialmente preparada para la eventual atención de personas infectadas por virus altamente letales, como el ébola. Sanidad activará el mismo protocolo asistencial que atendió a Pajares.

El religioso Manuel García Viejo estuvo ingresado hasta ayer en una unidad de ébola del Hospital de Freetown, en la capital de Sierra Leona. El enfermo, nacido en Folgoso de la Ribera (León), es especialista en medicina interna y está diplomado en medicina tropical. Pertenece a la OHSJD desde hace 52 años y ejerce como médico en África desde hace 30. En el 2002 se hizo cargo de la dirección médica del centro en el que se ha contagiado del virus hemorrágico, un hospital que, como todos los de aquel país, es receptor de enfermos del ébola desde que el pasado diciembre se inició el brote que afecta a Liberia, Guinea y Sierra Leona. La epidemia ha causado la muerte a 2.625 personas y ha enfermado a 5.340.

Antonio García Viejo, hermano del religioso enfermo, afirmó ayer que hace días que «sospechaban» que Manuel estaba enfermo. García Viejo visitó su pueblo natal en el verano del 2013. No vino este verano.

En esta ocasión, no se ha especificado quién asumirá los gastos del traslado del enfermo a España. La repatriación de Miguel Pajares estuvo envuelta de cierta polémica ya que, en un principio, la directora general de Salud Pública, Mercedes Vinuesa, informó de que el Gobierno y la orden de San Juan de Dios «compartirían» los gastos de la repatriación, que fuentes próximas al proceso situaron en unos 50.000 euros, sin contar los aspectos sanitarios. Finalmente, se descartó esa idea y fueron los ministerios implicados en la operación los que asumieron el coste del traslado, al igual que el de la asistencia sanitaria de Pajares.

Vinuesa reiteró ayer, como en la anterior ocasión, que el riesgo de que el enfermo suponga un peligro para la salud pública española es «prácticamente nulo». Manuel García Viejo recibirá los cuidados que requiera su evolución, que consistirán en antitérmicos, analgésicos, hidratación exhaustiva y nutrición adaptada. Es posible que Sanidad solicite para él alguno de los fármacos antivirales que experimentan varios laboratorios norteamericanos y canadienses. La evolución de García Viejo es impredecible en estos momentos. El virus que causa el actual brote del ébola acaba con la vida de uno de cada dos infectados.