PROTESTA VECINAL

Gamonal, un proyecto urbanístico bajo sospecha

El alcalde de Burgos, Javier Lacalle, ha sido el principal defensor de una reforma que debía llevar a cabo la empresa de un condenado por corrupción

Miembros del Cuerpo Nacional de Policía en los disturbios que han provocado cientos de personas participantes en una protesta vecinal en el barrio de Gamonal, en Burgos.

Miembros del Cuerpo Nacional de Policía en los disturbios que han provocado cientos de personas participantes en una protesta vecinal en el barrio de Gamonal, en Burgos. / Santi Otero

EDUARDO LÓPEZ ALONSO / Barcelona

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La batalla de Burgos se ha convertido ya en mucho más que protesta vecinal contra un proyecto urbanístico polémico. Puede llegar a ser el símbolo de un triunfo de la ciudadanía frente a los poderes públicos. Mientras los vecinos acampaban y se hacían fuertes en la calle contra la construcción de una zona peatonal y un aparcamiento subterráneo, el alcalde del PP, Javier Lacalle, había hecho oídos sordos a la oposición hasta ahora pese a las batallas campales. El alcalde prefiería mantener contra todos los elementos el proyecto concedido al empresario Antonio Miguel Méndez Pozo, constructor y magnate de la comunicación en Castilla y León, dueño del principal periódico local, 'El Diario de Burgos'. Mayorías contra minorías. Para aliñar todavía más la polémica y las sospechas, Méndez Pozo fue condenado por corrupción en 1992 a siete años de prisión por el llamado 'caso de la construcción', aunque cumplió nueve meses ya que se benefició en tiempo récord del tercer grado.

Indignación y logro

Mientras los vecinos de Burgos reclaman por todos los medios más plazas de aparcamiento gratuitas, la concepción de ciudad de Lacalle es radicalmente distinta y pensaba hacerla valer esgrimiendo el permiso legal que le dieron los votos. Sin embargo, la ciudadanía se ha encolerizado a ritmo de indignación y los métodos y tesis del Movimiento 15-M. Por ahora, los ciudadanos movilizados han parado el proyecto.

El que debía ser el gran beneficiado de la jugada urbanística de Gamonal (Méndez Pozo) es considerado una persona próxima al expresidente José María Aznar. El auge de Méndez Pozo se consolidó de la mano del anterior alcalde José María Peña (PP), condenado a 12 años de inhabilitación por el mismo 'caso de la construcción' y que recibió el indulto de Aznar.

En los papeles de Bárcenas

Para liar todavía más el asunto de las relaciones entre el actual alcalde, Peña y el constructor, resulta que los denominados papeles de Bárcenas apuntan a que se realizó un presunto pago de una compensación a Peña de 188.000 por la pérdida del cargo tras ser condenado. El paso por la cárcel de Méndez Pozo tampoco supuso un varapalo a su posición socioeconómica ni un lastre a la hora de conseguir el concurso para la construcción del párking de pago de Gamonal.

Las principales críticas

Las principales críticas al proyecto se basan en que supondrá la venta a 19.000 euros de plazas de garaje en un momento de crisis. El proyecto es además costoso, ya que el párking subterráneo se hace sobre un rio. En cualquier caso supone una actuación sobre una vía que transformaría la calle principal y eje vertebrador de toda la ciudad.

Apoyo del PP al alcalde

Burgos, con una población de 180.000 habitantes, no está acostumbrada a muestras de indignación colectiva a las registradas en los últimos días. El barrio que rodea Gamonal supone el 35% de la población y hasta ahora la mayoría de los votantes eran del PP. El partido ha mantenido hasta ahora una posición firme junto a su alcalde. El secretario general del PP en Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, ha responsabilizado a un grupo minoritario de extrema izquierda de los violentos incidentes ocurridos en Burgos desde la madrugada del sábado, en las protestas vecinales contra el proyecto del bulevar en el barrio de Gamonal.

Protesta y crisis

Fernández Mañueco, en declaraciones a la Agencia EFE este martes, ha considerado injustificable e inadmisible este "desafío al Estado de derecho" por parte de un "grupo minoritario de extrema izquierda" interesado en radicalizar una protesta vecinal que, en su opinión, "no debe extrapolarse a la situación de crisis" que atraviesa España. Sobre Lacalle, Fernández Mañueco ha destacado su "capacidad de gestión, eficacia, cercanía y diálogo con el ciudadano", y recordado que el bulevar diseñado, origen del conflicto, "iba en el proyecto de legislatura del PP y de otras fuerzas políticas". Ahora deberá ser replanteado.