Figueres investiga la «implicación» de la estación del AVE en la riada

A los responsables de Adif se les está abriendo un nuevo frente en las comarcas de Girona. Tras la polémica desatada por el pozo sobre los túneles del AVE de la capital gerundense y la entrada de millones de litros de agua en dos ocasiones, los ayuntamientos de Figueres y Vilafant (Alt Empordà) han decidido ahora encargar un estudio para determinar si hubo una «implicación» de la estación del AVE que da servicio a ambos municipios en las inundaciones y la riada que causó un enorme socavón en la rambla de la capital ampurdanesa el pasado domingo.

«Aunque las lluvias fueron excepcionales, hay un tema que no queremos dejar de lado, y es saber qué implicación puede tener el hecho de que toda la canalización de la estación vaya a parar a la riera», explicó la alcalesa de Figueres, Marta Felip (CiU). La riera de Galligans rodea la estación de la alta velocidad antes de adentrarse soterrada en la ciudad y atravesar el núcleo urbano por debajo de la rambla.

REVISADA

El pasado domingo, la fuerza del agua provocó un socavón de 40 metros cuadrados que engulló dos plátanos centenarios y dejó descalzada una de las calles que rodea el paseo. La rambla se cubrió en 1828 y nunca había pasado nada semejante. Además, la galería que la cubre había sido revisada días antes de que ocurriera el incidente sin que se detectara ninguna anomalía.

Los técnicos municipales sospechan que el pilar subterráneo que sostiene el monumento a Narcís Monturiol, y que es el único obstáculo que encuentra el agua en ese punto, pudo haber provocado un remolino que acabó erosionando el muro de la galería. Lo que es más difícil de explicar es el motivo por el que la riera bajó con tanta fuerza.

El ayuntamiento ha encargado un estudio a una empresa externa para establecer la capacidad de la riera y el incremento de aportación de agua que supone la canalización de la estación de la alta velocidad para determinar «si se calculó bien el caudal que la riera de Galligans puede aguantar», precisó la alcaldesa.

Otra de las razones por las que se impulsa el estudio son las inundaciones periódicas que sufren varias casas de Vilafant y Figueres próximas a la estación cuando hay lluvias torrenciales desde que se estrenó la infraestructura. «Hemos de ser prudentes y ver el impacto que puede tener sobre la riera una infraestructura como esa», inistió la alcaldesa.

La estación de Figueres-Vilafant tiene una superficie de 16.200 metros cuadrados y dispone de un aparcamiento con capacidad para 170 vehículos. Aunque la línea del AVE entre Barcelona y Figueres se estrenó en enero del 2013, las instalaciones entraron en servicio en diciembre del 2010 para atender a la circulación de ancho internacional procedente de la frontera francesa por el norte y del ancho ibérico que llegaba desde Barcelona por el sur.

UN METRO DE AGUA

Desde que se construyó esta infraestructura, algunos vecinos han denunciado que se producen inundaciones cuando llueve en abundancia. Es el caso de María López y de su cuñado, Francisco Gualda, que viven en dos casas situadas en los números 13 y 15 de la calle de las Pedreres de Figueres. El pasado domingo el agua alcanzó casi un metro dentro de las viviendas, causándoles graves daños en el mobiliario y en electrodomésticos como la lavadora y la caldera. «Llevo viviendo más de 50 años aquí y nunca había entrado agua en mi casa hasta que construyeron la estación, ni siquiera cuando en los años 60 se inundó parte de Figueres a causa de unas tormentas», explicó Gualda.

Fuentes de Adif han precisado que el responsable directo de la gestión de la estación de Figueres-Vilafant no ha recibido hasta ahora ninguna queja sobre la instalación o su entorno. «Si se recibe alguna queja o algún informe, ya sea de un particular o de una administración, lo estudiaremos y se le dará la tramitación correspondiente», afirmaron.