La regulación de las mascotas

¿Y esto quién lo paga?

Acogida 8 Una cuidadora sujeta a dos perros en las instalaciones de la perrera de Collserola, en Barcelona, el pasado viernes.

Acogida 8 Una cuidadora sujeta a dos perros en las instalaciones de la perrera de Collserola, en Barcelona, el pasado viernes.

MARÍA JESÚS IBÁÑEZ
BARCELONA

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Muchas cosas han debido de fallar en los últimos años para que el registro general de animales de compañía de la Generalitat tan solo haya inscrito al 2% de los perros y gatos domésticos que se calcula que habitan en Catalunya. Y para que únicamente 188 de los 947 ayuntamientos catalanes -menos del 20%- hayan incorporado los datos de su municipio en el censo autonómico. De entrada, el Gobierno catalán admite que la aplicación informática con la que se accedía a ese registro (sustituido desde ayer por uno nuevo, Anicom) presentaba problemas técnicos y reconoce que su margen de maniobra es escaso, si antes no consigue saber con exactitud cuál es la población canina actual.«Solo entonces se podrán planificar instalaciones de acogida y plantear campañas de identificación»,argumenta Josep Escorihuela, director general de Medi Natural de la Generalitat.

Pero pese a la autocrítica, lo cierto es que el control de las mascotas en Catalunya funciona como un auténtico reino de taifas. Cada territorio -cada municipio en este caso- aplica las medidas que su ayuntamiento considera más oportunas, más adecuadas a las características de su población... o las que le son más rentables.

Hay tantos criterios de gestión de los animales de compañía, tantas políticas como consistorios. Unos (Barcelona, Girona, Terrassa, entre otros) se han acogido a la posibilidad prevista en la ley de haciendas locales de cobrar una tasa que grava a los propietarios de perros y gatos. Otros prefieren que el registro sea gratuito,«como medida para estimular las inscripciones»,explica una portavoz del Ayuntamiento de Santa Coloma de Gramenet. Gracias a esta gratuidad, se vanagloria este consistorio, «en octubre del 2011 se ha conseguido la cifra más alta desde la creación del registro municipal, con 4.240 perros y 93 gatos censados».

La mayoría, gratis

De hecho, según asegura el secretario general de la Federació de Municipis de Catalunya (FMC), Adolfo Moreno, «la mayoría de consistorios no aplican la tasa». Entre otras razones, agrega Moreno, «porque no es cuestión de pedirle a una señora mayor que pague por tener un animal de compañía»,dice.

Y hay quien va incluso más allá. En Caldes de Malavella (Selva), uno de los municipios destacados por la Generalitat por la buena gestión que está haciendo en este asunto, el ayuntamiento no solo ofrece censar gratis al animal. Además de eso, en los últimos años,«ha estado dando apoyo económico a los propietarios que han implantado un chip localizador a sus animales y los han registrado. También ha habido ayudas a la esterilización»,indican fuentes del consistorio.

Con todo, son varios los ayuntamientos catalanes que están barajando la posibilidad de incluir este impuesto local en sus ordenanzas fiscales del 2012.

Los ayuntamientos que optan por aplicar la tasa de tenencia de animales de compañía justifican el tributo por el uso de la vía pública que hacen las mascotas.«Aunque la mayoría de dueños ya retiran de forma sistemática los excrementos que dejan los animales, es evidente que estos son un foco de suciedad y que las brigadas municipales de limpieza han de trabajar más en las zonas frecuentadas por perros»,explica una veterinaria municipal.

A cambio, señala, los consistorios se comprometen a destinar los fondos recaudados a la mejora de las zonas de recreo y otros equipamientos urbanos para los canes. Parte de ese dinero sirve también para el mantenimiento de las perreras. Los importes de la tasa son dispares, con tarifas que van desde los 4,30 euros anuales que cobra este año Sant Vicenç de Castellet (Bages) hasta los 23,85 que está aplicando Viladecans y los 27 de El Prat de Llobregat (ambos en el Baix Llobregat).

«No es un impuesto que les permita hacer negocio»,afirma en su defensa el director general de Medi Natural.«El dinero que se recauda no compensa, en estos momentos, toda la gestión que hay que hacer», corrobora el secretario general de la FMC.