CONFLICTOS INTERNOS

Escrache a la cena navideña de los mandos de los Mossos d'Esquadra

GUILLEM SÀNCHEZ / BARCELONA

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Unos 200 agentes de los Mossos d’Esquadra hicieron un escrache a sus superiores mientras estos celebraban la cena de Navidad en el interior del restaurante IT, en la vía Augusta de Barcelona. El local está al final de un pasaje comercial que se llenó mientras duró la cena de policías sin uniforme -pero con gorros de Papá Noel y nariz de payaso- que protestaron ruidosamente contra el comisario jefe, Josep Lluís Trapero.

Se trata de la segunda acción pública de protesta iniciada por agentes de los Mossos después de que el pasado jueves una decisión de la cúpula dejó sin efecto la detención del hombre que atropelló a un mosso de paisano que pretendía identificarle en Rubí. La primera fue el pasado viernes delante de la comisaría precisamente de Rubí. 

El lunes Trapero se reunió con la totalidad de los mandos del cuerpo en una reunión extraordinaria en el Complex Central Egara y por la noche con los compañeros del agente herido en la comisaría de Rubí. En ambos encuentros explicó por qué la decisión de dejar sin efecto la detención era la "correcta". El "modelo policial", sostuvo, debe "crear empatía" con el ciudadano y en este caso el vecino de Rubí afectado -"sin antecedentes"- actuó presa del pánico que le invadió al creerse víctima de un atraco. Trapero quiso subrayar que este gesto hacia el arrestado no debe interpretarse "en ningún caso" como un desaire al mosso herido.

Los sindicatos CATSAPSMESPC y USPAC consideran que se trató de una injerencia en el trabajo de los investigadores que decidieron arrestar al conductor y avisan de que la decisión ha generado "un malestar sin precedentes".