CORRESPONSABILIDAD FAMILIAR EN LA EDUCACIÓN

La escasa participación escolar de los padres ruboriza a Rigau

Irene Rigau.

Irene Rigau.

JORDI CASABELLA
BARCELONA

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La presentación de un estudio que ilustra acerca de la baja participación de las familias catalanas en las elecciones para renovar los consejos escolares, el órgano de gobierno de los centros públicos y concertados en el que los padres tienen una cuota de representación, junto con el profesorado, el alumnado (en la enseñanza secundaria) y los empleados del centro, llevó ayer a laconsellerade Ensenyament, Irene Rigau, a decir que los datos le habían «sacado los colores». El trabajo, dado a conocer en el marco de la presentación del proyectoIndicadores de participación de los padres en la enseñanza obligatoriade la UE, indica que Catalunya es, junto a Galicia, la comunidad española donde el desinterés de los padres por los consejos escolares es mayor.

Aunque la conclusión se fundamenta en datos anteriores todavía más negativos, en la última convocatoria electoral de finales del 2010 (los comicios se celebran cada dos años) únicamente un 15% de los padres con derecho a voto participaron en ella, un porcentaje muy inferior al 38% de los estudiantes, el 48% de los empleados y el 85% de los enseñantes que acudieron a las urnas, según los datos que facilitó la entonces Conselleria d'Educació.

DÉFICIT GENERALIZADO/ El estudio señala que los índices de participación más altos se registran en Castilla-La Mancha, donde acuden a las urnas un 20% de las familias, lo que ilustra sobre «el déficit del modelo español» en este capítulo.

Rigau, que presidió el acto de presentación del informe en la sede de laconselleria, se mostró dispuesta a reflexionar sobre la forma de reactivar la actividad de las asociaciones de madres y padres de alumnos, entre cuyas misiones se halla la de dinamizar la participación de las familias en el gobierno escolar. «El modelo debe buscar ahora mayores responsabilidades compartidas con las familias», agregó. Laconselleraconcluyó que las administraciones tienen que realizar un «examen de conciencia» por haber contribuido a que las asociaciones de padres se hayan convertido en plataformas de servicios extraescolares, algo, dijo, que no se ajusta a su razón de ser.

Paradójicamente, Ensenyament suprimió por primera vez en el 2011 la convocatoria de subvenciones dirigidas a sostener las actividades de las federaciones de padres de la escuela pública y concertada, que no han recibido garantías de que vaya a reaparecer este año. En el caso de la mayor organización de la red pública, la Federació d'Associacions de Mares i Pares de Catalunya (FAPAC), la subvención equivalía al 40% de su presupuesto anual y parte de ella se destinaba, precisamente, a programas para tratar que las familias tomaran conciencia de la importancia de involucrarse en la gestión de los centros.