Editar cerdos

Empiezan a aparecer resultados de la aplicación de lo que se denomina edición de genomas, es decir, producir modificaciones en lugares concretos del ADN donde hay genes que pueden producir efectos interesantes. Van saliendo resultados en animales y plantas y ahora les ha tocado el turno a los cerdos. Algunos piensan que pronto podríamos tener su carne en nuestros platos.

Dos trabajos recientes lo han realizado en el Instituto Roslin de Edimburgo, uno de los centros más activos en Europa en investigación sobre animales de granja. Fue conocido por haber producido el primer animal clonado, la oveja Dolly. Uno de los resultados es un cambio en el genoma que genera en el cerdo una mutación en un gen que produce la miostatina, una proteína que regula la producción del músculo. En la vaca esta mutación da lugar a una raza, la belga azul, que tiene una elevada producción de carne. Cuando han mutado este gen en el cerdo, el resultado es también un animal con más músculo y menos grasa. El segundo ejemplo es una aproximación similar hecha sobre un gen del sistema inmunitario que puede crear animales resistentes a la peste porcina, enfermedad vírica que es una importante plaga en los cerdos.

La cuestión ahora es saber si estos animales llegarán en algún momento a nuestros platos. Por un lado, en el caso de las vacas de la raza azul belga, los terneros son más grandes y tienen que nacer por cesárea. Algo parecido puede ocurrir con los cerdos. Por otra parte, se puede considerar que son animales modificados genéticamente. La legislación para aprobarlos es complicada, hay gente que no los quiere y esto puede suponer que su comercialización sea difícil, como es el caso de un salmón que crece más deprisa y que lleva más de veinte años sin ser aprobado. Se puede discutir si vale la pena todo esto para tener un jamón mejor y más magro, pero quizás sí para librarnos de la peste porcina. Como en otros casos, en Europa tardaremos en tomar una decisión.