Devuelven a la costa de Begur un cuerno marino pescado accidentalmente

Unos pescadores lo sacan accidentalmente del agua con una red, a unos 64 metros de profundidad

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Los Agentes Rurales han devuelto al mar un ejemplar de cuerno marino (Charonia lampas lampas), después de que unos pescadores lo sacaran accidentalmente del agua con una red, a unos 64 metros de profundidad, frente a las costas de Begur. Según han informado hoy desde el Departamento de Agricultura, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Natural, se trata de una de las especies de invertebrados protegidos en nuestra costa, catalogada como en "peligro de extinción" según el Catálogo de especies amenazadas de Cataluña, ya que su población está en fuerte regresión.

La semana pasada, los pescadores de la embarcación Santi Juan, del puerto pesquero de Palamós, avisaron a los Agentes Rurales de una captura accidental de una caracola gigante que estaba marcada con unas anillas. Este hecho les resultó extraño y, haciendo caso de las directrices de la cofradía de dar aviso ante cualquier animal marcado que extraigan de mar, lo notificaron. El cuerno marino es un molusco y, dentro de este grupo, es el gasterópodo más grande del Mediterráneo, mide entre 20 y 30 centímetros, y ocasionalmente puede llegar a los 40. El ejemplar liberado el pasado día 21 en la costa de Begur por los Agentes Rurales medía 26 centímetros de largo y pesaba 1,110 kilos. Esta especie vive tanto en zonas rocosas como en fondos blandos, llegando hasta los 200 metros de profundidad, y se alimenta principalmente de estrellas y erizos de mar y otros equinodermos.

Las poblaciones de este animal han ido disminuyendo de forma alarmante las últimas décadas hasta el punto de ser catalogada como especie vulnerable, es decir, que de no corregirse los factores negativos sobre esta especie en breve puede pasar a estar en peligro de extinción. Las principales amenazas de esta especie son, por un lado, la pesca con redes de arrastre y la comercialización para el consumo humano, sobre todo en zonas como el sur de la Península y, por otro, su concha es muy preciada como trofeo y elemento de decoración, por lo que algunos buceadores también la extraen del agua.