Operación policial

Detenidas 60 personas por una estafa de multipropiedades en Málaga

La investigación detecta más de 500 afectados, en su mayoría jubilados británicos

JULIA CAMACHO / SEVILLA

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

La Policía Nacional ha detenido en Málaga a 60 personas por una estafa vinculada a la multipropiedad en la que se habrían detectado más de 500 víctimas, principalmente ciudadanos británicos jubilados. La organización desarticulada utilizaba empresas pantalla con teleoperadores que contactaban con los propietarios de viviendas multipropiedad para ofrecerles su venta a un precio muy atractivo. Durante la investigación se ha incautado o bloqueado efectivo y propiedades por un valor cercano al millón de euros, aunque se estima que la red pudo haber estado cerca de 30 millones de euros en seis años.

Según ha informado la Policía, la organización tenía un entramado de hasta 11 sociedades pantallas que contrataban teleoperadores a los que facilitaban un listado de posibles víctimas y un guión de lo que debían comentar. Ofrecían recomprar los derechos de multipropiedad pero, con el objeto de sufragar los gastos de la gestión del supuesto contrato de compra, exigían a las víctimas un pago por adelantado, aunque la compra no se llegaba nunca a realizar ni el importe entregado era devuelto.

La estafa pasaba entonces a un segundo nivel, en el que los detenidos se hacían pasar por un despacho de abogados que ayudaba a personas que han sufrido una estafa en relación a las viviendas compartidas, y aseguraban que están recopilando denuncias para hacer una reclamación ante el juzgado por lo que pedían una provisión de fondos para llevar el caso a juicio. En una tercera fase de la estafa, la organización se hacía pasar incluso por funcionarios judiciales que pedían el pago de una serie de tasas para poder cobrar la indemnización en el falso juicio que se había celebrado. "Estos engaños eran más fáciles, porque se hacían pasar por gente que les iba a ayudar en la estafa que realmente habían sufrido", dice

Los agentes se pusieron sobre la pista de lo que estaba ocurriendo al detectar a un grupo de personas que recibían un pequeño porcentaje de beneficio económico por abrir con su nombre cuentas bancarias. Además de figurar como titulares, estos testaferros retiraban el dinero de las cuentas para entregárselo en metálico a otros miembros de la organización y tratar así de dificultar el descubrimiento de quienes controlan realmente la empresa, tres ciudadanos también británicos. La Policía averiguó que estas personas pertenecían a una organización más amplia dedicada a estafas relacionadas con las propiedades 'time sharing', muy populares entre los extranjeros en la Costa del Sol.

En total la Policía ha detenido a 60 personas entre teleoperadores que captaban a las víctimas, testaferros, controladores que captaban testaferros y ejercían el control sobre ellos y los superiores jerárquicos de la organización, a quienes se considera responsables de crear toda la estructura para llevar a cabo la estafa, proporcionar listados de víctimas y formar a los reclutadores, además de encargarse de blanquear el dinero recibido en el Reino Unido o en sociedades de Gibraltar.

La operación, en la que han participado agentes de la Brigada Central de Delincuencia Económica de la UDEF Central y la Sección de Delitos Económicos y Tecnológicos de la Brigada Provincial de Málaga, se ha saldado con ocho registros en esta provincia. Además, se han incautado de 97.363 euros bloqueados en cuentas bancarias, otros 30.061 euros en metálico y 800.000 euros en propiedades embargadas. Además hay 78 cuentas bancarias bloqueadas y se ha incautado una embarcación, seis vehículos, 49 equipos informáticos, un televisor y seis terminales de telefonía móvil, una máquina cuenta billetes, una destructora de papel y una centralita telefónica. Gracias a la información obtenida en los registros se han obtenido datos de más de quinientas víctimas, en su mayoría residentes en el Reino Unido. El caso está siendo investigado por un juzgado de Fuengirola.