El CSN no decidirá sobre Garoña hasta después de junio

El pleno  Consejo de de Seguridad Nuclear (CSN) ha rechazado la petición de la mayoría de los partidos políticos de frenar cualquier decisión sobre la reapertura de la central nuclear de Santa María de Garoña, en Burgos, pero ha especificado que el informe final no se emitirá hasta el segundo semestre. Todas las formaciones a excepción del PP habían pedido que se paralizaran los trámites mientras el Gobierno esté en funciones.

El organismo ha optado por seguir adelante con la aprobación de los informes técnicos previstos para este miércoles. Lo ha hecho con los cuatro votos a favor de los consejeros nombrados por el PP y el de la socialista Rosario Velasco, frente al voto en contra de Cristina Narbona, la otra consejera nombrada por el PSOE. La fecha del segundo semestre para el informe final se ha fijado aendiendo los trámites que tiene que seguir la evaluación técnica y no la petición de los partidos, han precisado fuentes del Consejo 

INDUSTRIA DECIDIRÁ

Tras el informe final del CSN, la palabra definitiva la tendrá el Ministerio de Industria. En caso de que el Consejo se pronunciara negativamente la decisión sería vinculante, pero en caso de informe positivo Industria podría denegar igualmente el permiso.

Los partidos, incluido Ciudadanos, que se apuntó a última hora, remitieron el martes por la noche una carta al presidente del CSN en la que se le advierte que en caso de un informe favorable a la reapertura, las compañías propietarias (Endesa e Iberdrola) podrían reclamar "pérdidas por lucro cesante en el caso de que el próximo Gobierno decidiera" que la central no vuelva a operar.

"Garoña está parada desde diciembre de 2012, por decisión unilateral y voluntaria", se señala en el escrito de los partidos. "Esta situación de parada no ha supuesto ningún problema para el suministro eléctrico y podría seguir en esta situación unos meses más". Por eso, piden "que el CSN detenga temporalmente el proceso de evaluación de la autorización de renovación de explotación de Garoña, hasta la formación del nuevo Gobierno al que corresponda la decisión final" sobre si se concede la reapertura de esta central, que ya cumplió sus 40 años de vida útil, el límite que hasta ahora se fijaba para las centrales españolas.