14 condenas por el motín de Quatre Camins

Una "agresión física conjunta, múltiple e indiscriminada" dirigida contra todos "los funcionarios de prisiones que se encontraban a su alcance". Así define un tribunal de la Au-

diencia de Barcelona el motín que se produjo el 30 de abril del 2004 en la cárcel de Quatre Camins, en la Roca del Vallès (Vallès Oriental). Los jueces han condenado a penas de entre un año y 17 años y nueve meses de prisión a 14 internos que encabezaron la revuelta en la que resultaron heridos el entonces subdirector del centro y otros cinco funcionarios.

En su sentencia, el tribunal absuelve a la Generalitat del pago de las indemnizaciones a los heridos como responsable civil subsidiaria, como pretendían las acusaciones, al no quedar acreditada la falta de medidas de seguridad, ni que el número de funcionarios para custodiar los módulos fuera insuficiente. Ahora serán los condenados, si no son insolventes, quienes deberán hacer efectivas dichas indemnizaciones.

HOMICIDIO FRUSTRADO

La condena impuesta es menor que la reclamada por la fiscalía y las acusaciones. En este sentido, ha influido el hecho de que el tribunal considere que la brutal agresión sufrida por el entonces subdirector del centro, Manuel Tallón, no se trató de un asesinato en grado de tentativa y, en cambio, sí de un homicidio frustrado, pues a su entender no existió ensañamiento ni alevosía. Solo por este aspecto, los jueces han rebajado la petición del fiscal de 15 o 13 años de cárcel --según el acusado-- a los nueve años y seis meses u ocho años y nueve meses impuestos finalmente dependiendo del caso. También ha disminuido el castigo por otros delitos, como el de lesiones.

Por la revuelta estaban acusados 17 reclusos, pero se ha absuelto a tres, entre ellos el que pidió un telé-

fono para hablar con la entonces consellera de Interior, Montserrat Tura. La revuelta fue protagonizada por unos 80 presos, encabezados por los condenados, a raíz de que se impidiera la entrada en la lavandería a un interno, lo que causó malestar entre sus compañeros.

CON PALOS Y UN PUNZÓN

Los reclusos, armados con palos y un pun-

zón, agredieron a varios funcionarios --el entonces subdirector fue el más perjudicado-- y durante tres horas retuvieron como rehén a uno de ellos. Por este motivo, han sido condenados por detención ilegal, intento de homicidio, lesiones, atentado y daños. Cuando acabó el motín, una serie de funcionarios supuestamente agredieron a algunos de los reclusos. Este juicio, en el que la fiscalía acusa y pide penas de hasta ocho años de cárcel, está pendiente.