DELITO POR REVELACIÓN DE SECRETOS

Condenado un detective privado por dar imágenes de un caso a una televisión

Se trataba de la sospecha de una empresaria ante uno de sus trabajadores ante su conducta laboral

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Un detective privado de San Sebastián ha sido condenado a un año y medio de cárcel y a tres de inhabilitación por entregar imágenes de un caso encargado por una particular a un programa de televisión que las emitió como parte de un reportaje sobre este tipo de investigadores.

Según la sentencia, con el fin de ilustrar este reportaje sobre los detectives privados, el ahora condenado entregó a la televisión autonómica vasca parte de unas grabaciones de vídeo que había hecho por encargo de una empresaria, que había contratado sus servicios para controlar la "conducta laboral" de uno de sus empleados. La mujer sospechaba que el trabajador sustraía dinero y género del establecimiento que ella regentaba, por lo que contrató al investigador para que vigilara al sospechoso. "Una vez finalizado el trabajo", explica la resolución judicial, el detective entregó a su clienta un informe del trabajo realizado junto a unas grabaciones de vídeo en parte de las cuales se veía "a una persona en el interior de un establecimiento comercial", sustrayendo "dinero de la caja registradora y género" que se encontraba "expuesto". El texto indica que posteriormente, el investigador entregó, sin el permiso de su clienta, "parte de las grabaciones efectuadas al trabajador", dentro de la investigación que le había sido encomendada, a un programa de la televisión autonómica vasca, que las emitió, con el rostro del empleado "pixelado", el 19 de julio de 2011 "como parte de un reportaje sobre detectives privados".

La sentencia considera ahora a este investigador responsable de un delito de revelación de secretos por el que le condena a un año y medio de prisión, así como una multa de 900 euros y le impone tres años de inhabilitación especial para el ejercicio de su profesión, al tiempo que le obliga a compensar a su clienta con 10.000 euros más los correspondientes intereses legales.