LA DISTRIBUCIÓN RESPONDE

La comida no se tira

Las cadenas de súper tienen acuerdos con oenegés para donar los alimentos sobrantes

JOSEP M. BERENGUERAS
BARCELONA

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«La comida no se tira».Esta es la respuesta que dan las principales cadenas de supermercados que operan en España ante la pregunta de qué se hace con los alimentos a punto de caducar o sobrantes. La mayoría de enseñas tienen acuerdos con diversas oenegés a las que reparten la comida sobrante, y muchas de ellas realizan campañas de recogida de alimentos de los propios clientes que después también se donan a las organizaciones.

Tras conocerse los«injustificables actos de violencia»,según las patronales del sector, acontecidos el martes, la Asociación Nacional de Grandes Empresas de Distribución (Anged), la Asociación Española de Distribuidores, Autoservicio y Supermercados (Asedas) y la Asociación de Cadenas Españolas de Supermercados (ACES) lanzaron un comunicado en el que critican duramente la acción del Sindicato Andaluz de Trabajadores (SAT). En el texto, las patronales afirman que la distribución comercial está teniendo un comportamiento«profundamente solidario»de la mejor manera que puede hacerlo, que es«bajando los precios»de sus productos a los ciudadanos en un momento de crisis.

Menos excedentes

«Se ha conseguido mejorar la capacidad adquisitiva de toda la sociedad pero, especialmente, se ha podido contribuir eficazmente a aliviar los efectos de la crisis en los segmentos económicamente más débiles»,afirmaron las tres patronales, que recordaron que la distribución comercial canaliza a través de múltiples oenegés, como el Banco de Alimentos, la donación de excedentes aptos para el consumo y conforme con la normativa de seguridad alimentaria.

Es el caso de Condis.«Las cadenas de supermercados contamos con muchas herramientas que nos ayudan a controlar el estoc y a evitar que sobre comida»,explican fuentes de la firma.«Hay excedentes causados por su packagingo porque la promoción no ha salido bien. Para estos casos tenemos acuerdos con varias oenegés y asociaciones, como Cáritas, a las que repartimos estos alimentos»,añaden desde la cadena catalana. La firma también colabora con otras iniciativas, como la campaña SOS Bebé, gracias a la cual ha donado 52.560 pañales para las familias en riesgo de exclusión.

Mientras, Carrefour, una de las compañías en la que el SAT irrumpió el martes, recuerda que colaboran con el Banco de los Alimentos desde el año 2000. La compañía dispone de la Fundación Solidaridad Carrefour, a través de la que realiza dos veces al año una campaña de recogida de alimentos: por cada kilo que los clientes donan, la compañía dona otro a la Federación Española de Bancos de Alimentos. Otra iniciativa similar esEl Gran Recapteque organiza el Banc dels Aliments de Barcelona, y que en el 2011 acumuló 1.095 toneladas de productos. Alcampo, Caprabo, Carrefour, Condis, Consum, Fragadis, Gros Mercat, Lidl, Mercadona, Mercats de Barcelona, Nova Venda, Plusfresc, Sorli Discau, Spar, Suma y Valvi participaron en ella. El Corte Inglés también colabora con esta organización.

Pero hay un tipo de alimentos que sí que acostumbran a terminar en los contenedores: los productos frescos. La mayoría de pequeños y medianos súper, al finalizar el día, tiran en la basura los alimentos frescos (pescados, pan y similares) que por su caducidad no se pueden donar, lo que provoca que en las grandes ciudades los más necesitados rebusquen en estos contenedores. Girona ha puesto candado a los contenedores y, a cambio, recogerá y distribuirá esta comida a los más necesitados.