REGRESO A LAS AULAS

Catalunya tendrá cultura humanística como materia alternativa a la Religión

Un alumno de una escuela religiosa escribe en la pizarra junto a un crucifijo colgado en la pared del aula.

Un alumno de una escuela religiosa escribe en la pizarra junto a un crucifijo colgado en la pared del aula.

MARÍA JESÚS IBÁÑEZ
BARCELONA

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No se trata de continuar con la Educación para la Ciudadanía -"entre otras razones, porque es una asignatura que se centra sobre todo en explicar cómo funciona el ordenamiento jurídico"-, ni de implantar clases de cultura religiosa o de historia de las religiones, como han hecho hasta ahora algunas escuelas. Se trata de aprovechar la creación de la nueva asignatura de Valores Sociales y Cívicos (que en secundaria se llamará Valores Éticos) para que los estudiantes catalanes adquieran "unos conceptos básicos de cultura humanística, de conocimientos éticos y filosóficos y de implicación social", explica Teresa Pijoan, directora general de Educación Secundaria de la Generalitat. "En los próximos días se harán públicas las concreciones del currículo de esta nueva materia para que los maestros sepan cómo impartirla", apunta Pijoan.

La asignatura, prevista en la ley orgánica para la mejora de la calidad educativa (LOMCE) como alternativa a la Religión, será evaluable para los alumnos de primero, tercero y quinto curso de primaria y sustituye a la antigua Ética o a la más reciente Enseñanzas Alternativas a la Religión. Los escolares de segundo, cuarto y sexto, a los que no les afecta aún la implantación de la reforma educativa del ministro José Ignacio Wert, seguirán como hasta el año pasado, indican fuentes de la Conselleria d'Ensenyament.

La intención, expresada en varias ocasiones por la 'consellera' Irene Rigau, es paliar, en la medida de lo posible, el déficit de conocimientos de cultura clásica, historia de las religiones y filosofía que tienen los alumnos cuando terminan la educación obligatoria. "La Generalitat llevaba tiempo trabajando en el desarrollo de una asignatura que dotara a los estudiantes de una cierta cultura general y, sobre todo, de unos valores y de un espíritu crítico", agrega la directora general de Secundaria.

GRECIA, ROMA Y JERUSALÉN

"La oferta que existía hasta ahora para los estudiantes que no cursaban Religión era, por decirlo de algún modo, muy diversa", señala Pijoan. Al no estar definido el contenido de la asignatura, cada centro la impartía según su propio criterio. La creación de los nuevos Valores Sociales y Cívicos por parte de la LOMCE "abre la puerta para definir el currículo de esta materia, que como la Religión será evaluable, es decir, que hará media en el expediente académico de los alumnos que la hayan elegido", indica la directora general.

En primaria, como ya adelantó este diario el pasado lunes, la materia se plantea en cuatro bloques, en los que los alumnos tendrán que "aprender a ser y a pensar, aprender a actuar de forma autónoma y coherente, aprender a convivir y aprender a ser ciudadanos responsables". En la ESO, los estudiantes darán un paso más allá y, además de las cuestiones éticas, se iniciarán también en contenidos relativos a la cultura clásica -Grecia, Roma y Jerusalén- «a partir de textos literarios y obras de arte», historia de las religiones y de las principales corrientes filosóficas hasta el siglo XX.

"Existe una necesidad cada vez más urgente, y así nos lo han hecho llegar en repetidas ocasiones, las universidades, de poner en valor las Humanidades", concluye Pijoan, que ha coordinado los trabajos de la ponencia de expertos que han colaborado en la elaboración del contenido de la nueva asignatura.

MEDIDA PRECIPITADA

Desde las escuelas e institutos, la decisión de Ensenyament, apuntada ya en las instrucciones que los centros recibieron el pasado junio, ha sido adoptada con cierta inquietud. "No por el contenido de la nueva asignatura, que celebramos, porque hasta ahora no existía un currículo claro, sino por la precipitación con que la conselleria pretende que los docentes la llevan a la práctica", constata Montse Ros, secretaria del área de Educación en el sindicato CCOO en Catalunya.

"A estas alturas, cuando apenas faltan unos días para que empiece el curso, no pueden pretender que los profesores cambien los temarios que tienen preparados para incluir esta nueva materia», advierte Ros. «Sería una auténtica falta de respeto hacia el trabajo que los maestros llevan haciendo desde julio", lamenta la sindicalista.

Ros recuerda que "desde que las escuelas ultimaron hace ya dos meses su programación para el próximo curso 2014-2015, cada profesor ha estado preparando los materiales didácticos, se ha coordinado con el resto de compañeros del centro... Y si ahora Ensenyament comunica que hay que introducir un nuevo contenido se hará merecedora de una impugnación", avisa la responsable de CCOO.