Pullmantur fleta aviones y autobuses para repatriar a España a los pasajeros del crucero incendiado

La embarcación, en la que viajaban 1.672 viajeros, y 603 tripulantes, se ha quedado bloqueada en el Adriático a causa de un fuego en la sala de máquinas

El crucero Zenith, en una imagen de la web de la compañía Pullmantur.

El crucero Zenith, en una imagen de la web de la compañía Pullmantur. / periodico

ROSSEND DOMÉNECH / Roma

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El crucero 'Zenith' de la compañía Pullmantur, que este martes ha sufrido un conato de incendio, ha sido remolcado, con sus 1.672 pasajeros --algunos de ellos catalanes-- y 603 tripulantes a bordo, hacia el puerto de Marghera (Venecia), donde aguardaban 40 autobuses que los habían de llevar al aeropuerto para regresar de inmediato a España, según han informado fuentes diplomáticas españolas y de la compañía.

Una vez en el puerto de Venecia, los pasajeros viajarán en 40 autobuses al aeropuerto de la ciudad italiana, donde seis aviones de Pullmantur Air partirán con destino a Madrid. Un séptimo aparato despegará desde Bolonia con destino a Barcelona. El cónsul de España en Milán, Emilio Fernández Castaño y el cónsul honorario, Antonio Simio Nato, han supervisado toda la operación de regreso a España.

Las fuentes diplomáticas resaltaron la rapidez y eficacia de la actuación de las fuerzas de socorro italianas y la coordinación con todos los departamentos relacionados con el suceso, que han sido puestos a disposición de la autoridades españolas.

En "pijama"

Un incendio en la sala de máquinas del crucero, cuando viajaba entre las localidades de Rávena y Venecia (noreste de Italia), dejó a la embarcación sin gobierno y a la deriva. Según las autoridades italianas, la capitanía del puerto de Venecia recibió en torno a las 4 de la madrugada del martes el aviso de emergencia desde la embarcación, que tenía previsto llegar a la capital del Veneto cuatro horas después.

Sin embargo, según declaraciones telefónicas de Josep Cortiella, uno de los pasajeros que viajaba en el crucero, a media mañana aún estaban a la espera de que hicieran algo. Cortiella aseguró, en una conversación recogida por el canal 3/24, que les habían subido al puente superior "en pijama", y que los habín tenido allí hasta las ocho de la mañana. Además, explicó que no tenían comida --aparte de unos bocadillos-- porque la cocina estaba inutilizada y que las autoridades del crucero "no sabían qué hacer".

El incendio, registrado en la sala de máquinas del crucero, fue controlado por el mismo personal de a bordo y es lo que motivó que el barco quedara bloqueado en el mar Adriático a unas 16 millas entre Puerto Levante y Chioggia con los motores apagados debido al fallo en el sistema de propulsión.

Los pasajeros fueron conducidos al puente superior del crucero y hasta el lugar se desplazó personal de la Capitanía de Puerto de Venecia, carabineros (Policía militarizada) y bomberos con un remolcador.