Amposta, capital taurina

Hace casi una semana que completaron orgullosos la colocación de las cinco hileras circulares de carros, camiones y palcos que componen la plaza de toros provisional más monumental de las Terres de l'Ebre. Reúne 220 vehículos y estructuras, y las mayores, en la parte externa, se instalaron el domingo con la ayuda de grandes grúas. Esa plaza que espera impaciente, y las calles más céntricas de Amposta, serán los escenarios principales de una ciudad que a partir de hoy y durante nueve días se erige en la capital taurina de Catalunya. Más de 40 de los 200correbousautorizados en las comarcas del Ebro saltarán a esa plaza y a esas calles en la temporada más polémica por la reciente prohibición de las corridas.

De ahí que el habitual nerviosismo de los numerosos aficionados ampostinos tenga el mismo componente festivo que cada año, pero esta vez se le une un impulso reivindicativo, porque la sensación general es que el principal elemento de sus fiestas mayores está siendo atacado injustamente:«Estamos en el ojo del huracán»,señalaba ayer Guillermo Martínez, presidente de la histórica Penya El Cerril. Al atardecer, Guillermo y el núcleo central de la Agrupación de Peñas y Comisiones Taurinas de las Terres de l'Ebre, que asocia al grueso de organizadores de actos taurinos de 24 municipios y 2 pedanías, acudían a una reunión extraordinaria para consensuar un manifiesto en defensa de losbous. La misma agrupación ha hecho una llamada a la población para que cuelguen banderas y pancartas e ideen lemas que ayuden a entender que una parte de Catalunya considera determinados actos taurinos como una tradición propia. E instarles a reclamar la aprobación de un decreto que dé a losbousmayor cobertura legal.

Peña La Checa

«Aún estamos pensando el mensaje que exhibiremos en el palco de la plaza»,explicaba Rogelio Reverté. Los componentes de su peña La Checa, una pandilla de 12 amigos, llevan 30 años ilusionándose con las fiestas. Rogelio es, además, miembro de la privilegiada Penya Capllaç, que hoy tiene un cometido muy especial. A las siete de la mañana, con camisetas rojas patrocinadas en las que aparece el toro estampado que les identifica, esta agrupación saldrá en minibús hacia la ganadería de Alfara de Carles para recoger el primer toro de las fiestas y pasearlo, con todos los honores, por la calle principal de Amposta.

«Este año tendremos unos 150 animales de 10 ganaderías para los actos programados»,calculaba el concejal de Gobernación y responsable de toros Josep Garriga. Ayer ultimaba la distribución de las barreras que conformarán el recorrido por el centro de la ciudad donde tendrán lugar los actos principales:bous capllaçats, embolats, encierros…«Me ha sorprendido ver alguna bandera de Catalunya con la imagen de un toro, porque lo habitual es colgar la senyera y la bandera de Amposta», reconocía.

Sin maltratos

«Quiero señalar muy especialmente que el primer toro ensogado del sábado es el cuarto año que viene a Amposta, lo que evidencia que no sufren ningún maltrato, porque de otra forma no serían aptos para volver»,remarcaba Rogelio Martí. La delegación territorial del Govern en las Terres de l'Ebre hizo público un comunicado aportando más datos con el ánimo de salvar la cara a losbous:«Desde el 2005 se ha incrementado la seguridad de las personas y el bienestar de los animales gracias a las recomendaciones que concilian la fiesta y el respeto al toro»,señala.

«El ambiente está caldeado, la gente está enfadada por las mentiras sobre los bous, pero debemos ser pacientes y demostrar que somos civilizados»,decía Mercé Benito. En su congelador, como no hay fiesta que no pase por el estómago, hay 10 rabos de toro para cocinar un

soberbio desayuno el sábado.