Alerta naranja en Zaragoza ante la crecida del Ebro

El Ayuntamiento de Zaragoza ha activado este domingo la alerta naranja por la crecida del Ebro ante "la inexactitud y baile de cifras" sobre la avenida y ha movilizado a los 130 agentes de la Unidad de Apoyo Operativo de la Policía Local. La punta de la crecida se acercará a partir de esta noche a Catalunya, donde la Generalitat espera que no tenga consecuencias debido a los desembalses de Mequinenza, Riba-Roja y Flix.

La Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) prevé que la punta de crecida del rio llegará a Zaragoza capital el lunes con un caudal que puede alcanzar los 2.200-2.300 metros cúbicos por segundo y una altura de 5,50-5,70 metros. En estos momentos, el Ebro registra en la capital aragonesa un caudal de 2.060 metros cúbicos por segundo y una altura de 5,28 metros, según el Sistema Automático de Información Hidrológica de la CHE.

ALFOCEA, AISLADA

El consistorio prevé que se corte el tráfico en un tramo del tercer cinturón y pedirá al Ministerio de Defensa que los vecinos de la pedanía rural de Alfocea, que están aislados desde esta mañana, puedan atravesar un terreno militar para poder salir del barrio. El agua ha desbordado la mota del barrio rural de Monzalbarba y la circulación de vehículos hasta la pedanía es imposible, han informado fuentes de los bomberos de Zaragoza.

Los vecinos solo podrán salir o entrar en lancha por una urgencia tras quedar ayer cortado el acceso por carretera a Alfocea por inundación. Los bomberos pusieron a disposición de los vecinos un camión para la entrada y salida en caso de necesidad, a las 13.00, las 16.00 y las 19.00 horas.

Los bomberos también han sido requeridos para evacuar a dos personas mayores, una niña y unos perros en una vivienda en la zona de Monzalbarba y en el área del Parque Deportivo Ebro están evacuando unos caballos, mientras que esta noche han tenido que ayudar a un ganadero del barrio de Juslibol a poner a salvo 400 terneros.

REGRESAN LOS VECINOS DE PRADILLA

Los vecinos de Pradilla ya pueden volver a sus casas, después de que este sábado fuesen desalojados por la crecida del Ebro y reubicados en el polideportivo de Tauste.

Durante la madrugada de este sábado, el ayuntamiento de la localidad activó el plan de emergencias por inundaciones y procedió a evacuar a los vecinos al polideportivo de Tauste, si bien algunos se alojaron en viviendas particulares. Parte de los vecinos fueron llevados a residencias de mayores y se esperará a mañana lunes para que puedan volver a la localidad.

El alcalde de Pradilla, Luis Eduardo Moncín, ha explicado que el agua no ha entrado en el casco urbano y que "lo habrá hecho por filtración, pero la mota ha aguantado, que era lo más importante".

EL EJÉRCITO CONSTRUYE UN PUENTE

Los vecinos de Boquiñeni, que también fueron desalojados este sábado, no podrán volver a sus casas hasta que no se finalice la construcción del puente de acceso a la localidad por parte de la Unidad Militar de Emergencias (UME), que podría estar finalizado entre esta tarde y mañana lunes. Parte de la carretera que conecta Boquiñeni con Luceni tuvo que destruirse este sábado para laminar el caudal del río.

Los cascos urbanos de las localidades navarras de Tudela y Buñuel continúan con calles inundadas por el Ebro, ha informado el Gobierno foral, que ha indicado que el nivel del agua desciende pero "muy lentamente". Según ha precisado, "se espera que a media tarde el descenso sea más apreciable", aunque a las 10 horas la página web de la CHE ya indicaba que en Tudela el río lleva una altura de 5,03 metros cuando el viernes, en la máxima crecida, marcaba 5,93.

LEVANTADA LA ALERTA EN NAVARRA

La CHE ha levantado la alerta roja que mantenía en Navarra por la crecida de los ríos, salvo para el Ebro en los términos de Castejón y Mendavia aunque su cauce se está estabilizando y se espera que continúe así en las próximas horas. A las 10 horas, según datos de la web de la Confederación, el caudal en esta localidad era de 1.676 metros cúbicos por segundo y la altura del río marcaba 6,68 metros. El viernes, en el pico de la crecida, alcanzó los 2.400 m3/s y una altura de 7,80 metros.

Las motas de contención están aguantado el caudal del río y la noche ha transcurrido en los pueblos de la ribera zaragozana "sin sobresaltos", según ha manifestado el consejero de Agricultura y Medio Ambiente, Modesto Lobón, aunque preocupa la situación en Cabañas de Ebro por las filtraciones en la mota, que están siendo achicadas "permanentemente", aunque esta "es muy potente" y se está reforzando colocando sacos terreros encima.

En Torres de Berrellén también se han realizado labores de recrecimiento de la mota, mientras que en Sobradiel se ha construido, preventivamente, un cordón de tierra para dar mayor seguridad al pueblo.