9 alcaldes de Tarragona, en guerra por la N-340

Los alcaldes de nueve poblaciones tarraconenses situadas a lo largo de la carretera N-340 se reunieron ayer para anunciar un gran acto reivindicativo, que tendrá lugar este mes en Tarragona, para exigir la gratuidad de la autopista AP-7 entre Altafulla (Tarragonès) y El Vendrell (Baix Penedès). Consideran que es la única solución ante el endémico colapso de automóviles y el incremento de accidentes que sufren sus municipios, en especial «entre la festividad de Sant Joan y el Onze de Setembre», lamentó el alcalde de El Vendrell, Martí Carnicer (PSC).

Los alcaldes de Altafulla, Torre-dembarra, Creixell, Roda de Berà, El Vendrell, L'Arboç, Bellvei y Cunit (el de Calafell no pudo asistir) acordaron pedir el apoyo de las entidades de cada municipio para contar con «el territorio» y fijar un calendario de acciones de protesta. Aseguran que es la única salida que les queda ante el repetido «desprecio» que han recibido por parte del Ministerio de Fomento, que no ha contestado a sus numerosas demandas de reunión.

«Nos interesa más la gratuidad de la autopista que el desdoblamiento de la N-340», precisó el alcalde de Torredembarra, Eduard Rovira (ERC). «No queremos amenazar, pero sí que nos tengan respeto. Estamos quemados», aclaró Fèlix Alonso (AA-E), el alcalde de Altafulla.