NORMATIVA POLÉMICA

Casi 106.000 abortos hubieran sido ilegales el año pasado con la ley que prepara el PP

Las interrupciones de embarazos cayeron un 5% el 2012, según la patronal de las clínicas abortistas

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Casi 106.000 de los 112.390 abortos practicados el año pasado en España hubieran sido ilegales con la reforma de la norma que prepara el PP y cuyo anteproyecto fue aprobado el pasado viernes por el Consejo de Ministros, estuviera ya en vigor.

En concreto, se trataría de 102.567 mujeres que interrumpieron el embarazo dentro de las 14 primeras semanas de gestación por voluntad propia, y de las 3.124 que lo hicieron por anomalías fetales graves. 

Las cifras gobales suponen un descenso del 5% respecto a los 118.259 abortos del año anterior, según los últimos datos facilitados por la Asociación de Clínicas Acreditadas para la Interrupción del Embarazo (ACAI).

Estos datos, según señala la asociación en un comunicado, confirman que, pese a los pronósticos del PP y los grupos provida, con la actual ley no se ha producido ningún aumento del número de abortos, sino al contrario, ya que la tasa ha disminuido del 12,44% al 12,01%.

La responsablidad de los psiquiatras

Las clínicas han denunciado que más del 90% de las mujeres estarán abocadas al "éxodo abortista o a someterse a un aborto clandestino", lo que podría poner en riesgo su salud y su vida. En cuanto a las 6.372 mujeres que en 2012 abortaron por salud materna con la nueva ley, tendrían "que someterse a un periplo legal, médico e ideológico de inciertos resultados".

Respecto al anteproyecto, ACAI considera "una aberración que los profesionales de la psiquiatría se vean obligados, poniendo en riesgo su seguridad jurídica, a ser confesores de la vida íntima de las mujeres que desean interrumpir si gestación".

Para esta asociación, "resulta de una crueldad sin precedentes que una mujer pierda su privacidad, al verse obligada a comparecer ante los que serán sus custodios voluntarios u obligados de la moral religiosa de una minoría".

Las clínicas han advertido de que si se aprueba la ley, "que nos aleja completamente de la realidad europea", las mujeres no solo perderán un derecho básico, sino que tendrán enormes dificultades para encontrar en su periplo médico y vital.