La factura de la reparación de los daños causados por la nevada del 2010 asciende a 90 millones

Un año después de la gran nevada, uno de los peores temporales que recuerda Catalunya, todo lo que falló parece ya enmendado. Los protocolos de emergencias han sido oportunamente revisados, en especial los de comunicación, asegura Protecció Civil, mientras que Medi Natural explica que mantiene abiertas las ayudas para que se acaben de limpiar las 147.800 hectáreas de bosque afectadas, de las que ya se han retirado 200.000 toneladas de madera. La eléctrica Endesa, contra la que se concentraron las más duras críticas, ha reinstalado 200 kilómetros de cable y más de 2.500 torres de alta y media tensión y garantiza que las infraestructuras dañadas se han reforzado con "las últimas técnicas".

En Barcelona, el ayuntamiento ha pactado con varias empresas de construcción para que 30 máquinas excavadoras se conviertan en quitanieves en caso de necesidad, y ha dotado a las escuelas más susceptibles de quedar aisladas de mantas térmicas y demás equipamiento, entre otras medidas. A lo largo de este año un total de 27 municipios (24 de ellos gerundenses) han elaborado un plan de actuación por nevadas y otros tres han revisado el suyo.

La factura de la reparación ascenderá, finalmente, a unos 90 millones de euros. Un dinero que se dará por bien invertido si sirve para evitar que las consecuencias fueran las mismas si hoy volviera a nevar como lo hizo el 8 de marzo del 2010. Los implicados (usuarios incluidos) están convencidos de que la lección está aprendida. Pero nadie pone la mano en el fuego.

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