RUBÉN, 32 AÑOS, MÚSICO, BADALONA

"Obtengo una hierba a mi gusto, natural y afrutada"

 Tener un producto a la carta es casi siempre lo que motiva a los fumadores a poner en marcha su propio cultivo de cannabis. Fuman por placer y a veces por mística, y rara vez, por no decir nunca, piensan en los riesgos para la salud. El retrato de cinco autocultivadores completa el tema sobre el auge del negocio legal de la marihuana que publicó ayer EL PERIÓDICO.

Una plantación de marihuana con 40 ejemplares en un piso de Badalona, en una habitación iluminada con leds y forrada con papel de aluminio para favorecer el crecimiento.

Una plantación de marihuana con 40 ejemplares en un piso de Badalona, en una habitación iluminada con leds y forrada con papel de aluminio para favorecer el crecimiento.

JOSEP RUBIO

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Esta es la primera temporada que siembra.«Como no tengo ninguna montaña a mi nombre, he empezado en mi casa»,dice. Allí ha sembrado 40 plantas. Para empezar, ha invertido 700 euros en luces, ventiladores y otros materiales. Sabe que el límite establecido por la jurisprudencia es de 12 ejemplares por cultivador, pero asegura que la cuestión no es el número de plantas:«Yo planto con macetas de siete litros y extraigo unos 25 gramos por planta. Si plantase menos pero con macetas de 100 litros tendría verdaderos árboles, de los que sacaría mucho más, hasta unos 200 gramos por planta. Esto del límite es relativo».

Para que el olor de los vegetales no invada su casa utiliza un gel habitual en las plataformas petrolíferas, al cual le ha encontrado otra utilidad: lo aplica en la caja de los deshechos de su gato. ¿Por qué autocultiva? Porque es una alternativa al mercado negro.«Así obtengo una hierba natural, afrutada, a mi gusto, desarrollada con productos orgánicos. En cambio, en el mercado encuentras marihuanas muy potentes, alimentadas con productos químicos».

Rubén vivió tres años en Amsterdam (donde se puede comprar cannabis de forma legal) y dice que en la capital holandesa«existe una aceptación social de la marihuana similar a la que existe en Barcelona».