SALUD

La ley del tabaco apenas ha reducido la cifra de adictos

Varias fumadoras, a las puertas de un edificio de oficinas de Barcelona.

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EL PERIÓDICO
BARCELONA

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La entrada en vigor de la ley española antitabaco, en enero del 2005, ha incidido de forma importante en el consumo de cigarrillos en determinados espacios públicos y en los lugares de trabajo, pero esa realidad no ha modificado la cifra total

de personas que fuman, un porcentaje que en Catalunya es del 29,4% de los ciudadanos, apenas dos puntos menos que antes de la llegada de dicha ley.

El consumo de tabaco subyace en la inmensa mayoría de las enfermedades del aparato respiratorio. La trascendencia social y sanitaria que ha adquirido ese grupo de enfermedades fue destacada ayer por la consellera de Salut, Marina Geli, que presentó los datos alusivos a estas dolencias y una cifra aún más inquietante, la de las muertes atribuidas a esta causa: cerca de 6.000 personas fallecen cada año en Catalunya por patologías respiratorias.

Más del 90% de esos fallecimientos están relacionados con el consumo de tabaco, sustancia a la que se atribuye, de forma global, la muerte de 8.700 personas si se tiene en cuenta a quienes fallecen por infarto, embolia cerebral o complicación de otras enfermedades en las que el consumo de cigarillos incide de forma determinante.

Los expertos prevén que esas cifras de fumadores descenderán de forma sensible si la actual ley antitabaco se extiende y se aplica en todos los establecimientos de restauración de España, incluidos los bares y restaurantes de menos de 100 metros cuadrados de superficie en los que ahora se puede fumar. Esa autorización se traduce en que el tabaco está permitido en más del 95% de los bares de España.

INSOMNIO Y NARCOLEPSIA / Las enfermedades del aparato respiratorio ya son la tercera causa de muerte en Catalunya, tras las defunciones provocadas por los tumores malignos y las que surgen del sistema cardiovascular. La enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) y el asma son las dos enfermedades respiratorias más prevalentes, seguidas de las bronquitis crónicas y las alteraciones del sueño.

Una forma alterada de respirar se encuentra en el origen de numerosos insomnios, narcolepsias y parasomnias. Estos malestares afectan en la actualidad al 6% de la población adulta y, aunque no siempre tienen una resolución completa, en algunos casos pueden suprimirse siguiendo un tratamiento adecuado y modificando los hábitos de sueño. Un 10% de las personas que son hospitalizadas en Catalunya en la actualidad sufren una enfermedad grave del aparato respiratorio.