CON VIENTOS DE 130 KILÓMETROS POR HORA

'Alex' se convierte en el primer huracán de la temporada en el Atlántico

El temporal obliga a detener parte de las tareas de contención del vertido del golfo de México

Fuertes vientos dificultan la contención del vertido.

Fuertes vientos dificultan la contención del vertido. / AP / PATRICK SEMANSKY

AGENCIAS

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La proximidad de la tormenta tropical Alex, que se ha convertido esta madrugada en el primer huracán de la temporada de ciclones del Atlántico en el 2010, ha obligado a detener parte de las tareas de limpieza y contención del vertido de crudo del golfo de México.

El presidente de EEUU, Barack Obama, declaró el martes en emergencia el estado de Texas ante la llegada del huracán, y ordenó el envío de ayuda federal para complementar los esfuerzos estatales y locales.

Alex, se encuentra en el suroeste del golfo y registra vientos máximos sostenidos de 130 kilómetros por hora, pero "tiene el potencial de transformarse en un huracán de categoría dos antes de tocar tierra" y comenzar a debilitarse. Se espera un giro mayor hacia el oeste en la tarde de hoy y, en esta trayectoria, el vórtice "podría tocar tierra esta noche o el jueves de madrugada", según el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos.

Fuertes lluvias en México y Texas

También se pronostican fuertes lluvias en zonas del noreste de México y del sur de Texas en los próximos días, así como inundaciones y deslizamientos de tierra. El Gobierno de México mantiene un aviso de tormenta tropical para el sur de La Cruz hasta Cabo Rojo, así como, ha emitido un aviso de huracán desde la desembocadura de Río Grande hasta La Cruz, en la costa mexicana.

El paso de Alex por tierra firme se producirá lejos de las principales instalaciones petroleras de la región. Sin embargo, parte de las labores para limpiar el vertido de crudo de la costa han quedado suspendidas por el mal clima provocado por la tormenta. Además, según han informado las autoridades estadounidenses, los trabajos de quema controlada del vertido en alta mar, los vuelos de aviones para lanzar dispersantes químicos y las operaciones de contención han sido interrumpidas. No obstante, las tareas submarinas de la petrolera británica BP para capturar el vertido de la fuga y los trabajos para la perforación de un pozo de alivio se mantienen.