MEDIOAMBIENTE

El pantano de Rialb llega a su cota máxima tras 11 años de llenado

ROSA MATAS
LLEIDA

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El pantano de Rialb que comenzó a inundar el pueblo de Tiurana (Noguera) el 4 de mayo de 1999 desembalsa ya agua desde su cota más alta. El jueves llegó a 430 metros y acabó su puesta en carga, que ha durado 11 años. La Confederación Hidrográfica del Ebro, titular de la infraestructura, abrió ayer compuertas para iniciar el último desembalse controlado, de 123 hectómetros cúbicos, última fase antes de que entre en explotación.

La sequía de hace unos años y las trabas de la Unión Europea a la construcción del canal Segarra-Garrigues están detrás de la lentitud del llenado. «Rialb ha acabado todos los protocolos de seguridad», dijo ayer el secretario de Estado de Medio Rural y Agua, Josep Puxeu.

Con el desembalse volverá a la cota máxima de la fase anterior, 420,5 metros. El nivel del agua baja a una velocidad de 30 centímetros al día.

El embalse, con una capacidad de 403,5 hectómetros cúbicos, se construyó para regular el río Segre y atender las demandas del canal de Urgell

y del Segarra-Garrigues. Ocupa tierras de La Baronia de Rialb, Basella, Tiurana y algunas fincas de Oliana y Peramola.

Sobre la continuidad de las obras del Segarra-Garrigues, Puxeu avanzó que Acuaebro adjudicará el 27 de abril el último tramo, cinco años después de la primera adjudicación. La obra fue licitada por 89 millones. El secretario de Estado dio por hecho que la Unión Europea cerrará los expedientes abiertos a España por haber hecho caso omiso durante varios años de la legislación comunitaria en la construcción del canal.