Turrones con solera

<b>Delicias navideñas.</b><b> </b>El turrón original a base de miel, azúcar y almendras ha evolucionado hasta convertirse en una pieza de alta gastronomía con mil y una posibilidades. Y es que a los clásicos turrones de jijona y chocolate, cada año se añaden otras variedades mucho más sofisticadas e imaginativas para los paladares más atrevidos. texto: luis benavides FOTOS: ADRIANA DOMÍNGUEZ

En la foto superior, Sirvent, endulzando las Navidades (y el verano) durante cuatro generaciones.En el centro, Baixas, un negocio familiar con más de 50 años de experiencia.Debajo, Natcha, una pastelería que combina tradición e in

En la foto superior, Sirvent, endulzando las Navidades (y el verano) durante cuatro generaciones.En el centro, Baixas, un negocio familiar con más de 50 años de experiencia.Debajo, Natcha, una pastelería que combina tradición e in

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CIUTAT VELLA

LA CAMPANA

Dulces con D.O.

La turronería La Campana (Princesa, 36) fue fundada en 1890 por Francisco Mira, nacido en Jijona, la cuna del turrón. «Durante cuatro generaciones hemos ofrecido turrones con denominación de origen (D.O.), con las mejores materias primas», cuenta Laura Ferrer, bisnieta del fundador. «Aquí la gente se espera al mismo día de Nochebuena y Navidad para comprar, cuando podrían comer turrón tranquilamente todo el año», añade Ferrer, quien apunta a las bondades de la almendra marcona, fuente de vitaminas e ideal para prevenir enfermedades cardiovasculares e intestinales.

EIXAMPLE

SIRVENT

No solo horchata

El apellido Sirvent es sinónimo de  buena horchata. Pero la horchatería Sirvent (Parlament, 56) también elabora ricos turrones entre noviembre y diciembre. «La gente nos conoce mucho por la horchata, que preparamos hasta el mes de octubre. Los turrones también tienen éxito, pero su venta es explosiva, en una o dos semanas», cuenta Tomás Sirvent, cuarta generación en el obrador familiar. «Cada año introducimos alguna novedad. Para estas navidades tenemos una variedad a base de chocolate blanco, cacao y fresas deshidratadas», añade. La empresa tiene un otro punto de venta en el 130 de la calle de Balmes.

GRÀCIA

PASTISSERIA VERDI

Amplio surtido

La Pastisseria Verdi (Verdi, 54) prepara cada año unos 25 turrones diferentes, polvorones y mantecados. «En Navidad tienen mucho éxito nuestras neules, que cubrimos con el mismo chocolate que los bombones, los tocinitos de mazapán y el mazapán de Cádiz relleno de fruta», cuenta Andrea Planas, nieta del fundador, actualmente jubilado.

HORTA-GUINARDÓ

PASTISSERIA MAYOL

Cinco generaciones

Los hermanos Joan y Glòria Mayol son la quinta generación de la Pastisseria Mayol (Horta, 59), abierta en 1854. «Hacemos todos los postres de fechas señaladas. Cuando se acaban los panellets, a mediados de noviembre, preparamos ya turrones», cuenta Joan, orgulloso de la acogida que tienen año sí y año también todos sus dulces navideños.

LES CORTS

NATCHA

Innovación y tradición

La pastelería Natcha (avenida de Sarrià, 45) combina tradición e innovación desde su fundación en 1958.  «Innovamos en sabores y en formatos. Ahora, por ejemplo, vendemos surtidos de turrones en unas cajitas que el cliente puede completar a su gusto», cuenta Marta Massagué. Este formato es ideal, cuenta la actual propietaria, para adaptarse a todo tipo de familias y bolsillos. 

NOU BARRIS

LA EXQUISITA

40 años en el obrador

Francisco Galiano empezó a trabajar en la pastelería La Exquisita (Artesania, 34) con 15 años. «Sigo las mismas recetas, sin conservantes ni colorantes», cuenta Galiano, quien entró como aprendiz en el obrador y ahora es el propietario. «Aquí llevo más de 40 años y tengo una clientela  muy fiel» , añade el pastelero.

SANT ANDREU

LA JIJONENCA

Hechos en Jijona

María Jesús Piñero, nacida en la tierra de los turrones por excelencia, Jijona, lleva 25 años endulzando el barrio de Sant Andreu con La Jijonenca (Segre, 22). «En verano tenemos helados, horchata y granizados; y a partir de noviembre y hasta finales de diciembre vendemos turrones de mi tierra», cuenta Piñero.  Sus turrones son de «calidad suprema».

SANT MARTÍ

TRIOMF

Nuevos sabores

La Pastisseria Triomf (Rambla del Poblenou, 41) ha evolucionado desde su apertura en 1952 en una pastelería actual con servicio de degustación, un amplio surtido de catering salado y especialización en bombonería.  «Para estas navidades tenemos dos novedades: el turrón de galleta Oreo y el turrón de praliné de avellana y kikos», cuenta Gisella Bellart, tercera generación al frente del negocio familiar.

SANTS-MONTJUÏC

VICENS

Todo el año

La casa de turrones Vicens, fundada en 1775 en Agramunt, cuenta con una veintena de establecimientos repartidos por toda la geografía, entre los que destaca por su singularidad el ubicado en el Poble Espanyol.  «El 95% de nuestros clientes son extranjeros y comen turrones durante todo el año. Aquí solo comemos en Navidad por algo cultural», cuenta Quique Pereira, propietario de la tienda Vicens de la calle de Caballeros, 10.  La marca Vives tiene más de 60 variedades de turrón, siendo la línea del chef Albert Adrià una de las más ... «Aquí se venden los sabores clásicos -cuenta Pereira-, pero alguna tableta diferente siempre se llevan para probar y dejarse sorprender».

SARRIÀ-SANT GERVASI

BAIXAS

Obras de autor

Moebius y Aina son los nombres de los turrones de autor con más éxito de la pastelería Baixas (Muntaner, 331). El primero es  un turrón de crema de jijona con naranja y el segundo, praliné de kikos con chocolate. «Este año estrenamos un turrón de yogurt y frambuesas que también se vende bien», explica la actual propietaria, Núria Baixas, hija de los fundadores del negocio familiar, Francesc Baixas y Conxita Melich. Los turrones comparten protagonismo y escaparate con los troncos de navidad, un postre típico para la noche de Fin de Año. H