Santa Coloma ve con escepticismo el compromiso de Red Eléctrica para negociar la MAT

La alcaldesa de Santa Coloma, Núria Parlon, ve con sorpresa y cierto escepticismo el compromiso de Red Eléctrica (REE) para negociar con el Ayuntamiento las condiciones de paso de la línea de Muy Alta Tensión (MAT) por el municipio, que incluirían la elaboración de un estudio de impacto ambiental del proyecto.

"Estamos ciertamente sorprendidos que salgan ahora con estas cuando el Ayuntamiento ha reclamado el estudio por muchas vías y siempre ha habido muchas reticencias", asegura Parlon.

Además, la alcaldesa cree que no habrá ninguna salida negociada porque desde el Ayuntamiento ven totalmente "innecesaria" la infraestructura y, en caso de hacerse, piden que sea enterrada y que no se haga ninguna nueva subestación.

Según la empresa, el paso de la MAT por Santa Coloma tendría una "afectación ambiental mínima" e insiste en la "mejora" que supondría para Barcelona y su área metropolitana, ya que la red pasaría de una tensión de 220 Kv a 400 kv. La actuación supondría la construcción de una nueva subestación junto a la existente actualmente.

Con todo, Parlon cree que se trata de una infraestructura "obsoleta" y "fuera de lugar" que no es necesaria para garantizar el suministro eléctrico "ni a Barcelona ni a su entorno".

La alcaldesa recuerda que no se ha dado ningún episodio de "apagones" desde 2007, cuando se reforzaron las líneas: "La MAT es para hacer correr energía no para garantizar el abastecimiento", asegura.

A pesar de que las posiciones son alejadas, el director general de Transportes de REE, Carlos Collantes, explicó el martes que intentaría un acuerdo con el Ayuntamiento para impulsar la MAT en "las mejores condiciones posibles". La alcaldesa, por su parte, opina que "no nos pondremos nunca de acuerdo" y asegura que continuará batallando para detener el proyecto definitivamente.

En este sentido, la Comisión Europea ya abrió un expediente al gobierno español por esta infraestructura por no disponer un estudio de impacto ambiental del proyecto, un estudio que ahora la compañía accede a hacer. La red eléctrica, denuncia Parlon, "pasa a 70 metros de las viviendas y también provoca un gran impacto en la Serralada de Marina".

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