Espinàs, 89 años (casi) en moto

Solo la lluvia impidió que el articulista se subiera a un 'scooter' para llegar a tiempo a la última firma del día

Josep Maria Espinas

Josep Maria Espinas / periodico

ERNEST ALÓS / BARCELONA

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Este 23 de abril Josep Maria Espinàs ha cumplido 62 'sant jordis' firmando y 40 años con columna diaria en la prensa, primero con el diario 'Avui' y desde hace 17 años en EL PERIÓDICO DE CATALUNYA. "Cada día es un texto nuevo y un artículo nuevo, hace años que dura y de momento no se parará", explicaba ayer después de tres sesiones de firmas de libros, tanto de su último libro, 'La vella capitana', como de la reedición de 'El teu nom és Olga' que este diario ha distribuido ayer en los quioscos. Y bien, tampoco era cuestión de truncar a estas alturas esta longeva carrera con un resbalón estilo Márquez sobre el piso mojado de la calle Balmes a lomos de una Piaggio X8 que acabase con el columnista descalabrado. Así que a última hora, cuando todo estaba dispuesto, piloto (el arriba firmante) y casco extra incluido, para que Espinàs se subiese de paquete a una moto para llegar a la cuarta de sus sesiones de firmas, Espinàs se mira la moto (más alta de lo que esperaba), la lluvia (más fuerte que hace unos minutos) y la prudencia le hace frenarse a última hora.

La mañana había empezado la mar de bien, con Espinàs firmando a troche y moche primero en La Caixa d'Eines y La impossible, con tantos lectores que todo se alarga una hora más de lo previsto. "Estoy contento, voy renovando público, me maravilla que siempre vengan también chicas jóvenes, con el marido o el prometido que se queda detrás; es esperanzador, siempre salgo contento de Sant Jordi", explica.

Por la tarde Abacus, en Rambla Catalunya / Còrsega, ya empieza cansado. Acaba media hora tarde, y sus piernas (los 89 años pesan) ya no dan para bajar andando los 600 metros atestados de gente que le separan de la Casa del Llibre de Rambla de Catalunya / Consell de Cent. Pasan ya 25 minutos de la hora prevista y le esperan una veintena de lectores con sus libros en mano (y este periodista). Y aquí empieza la 'operación Espinàs'.

'OPERACIÓN ESPINÀS'

"Si subes con la moto y tienes casco, Espinàs dice que se sube", asegura por teléfono su editora, Isabel Martí. Dicho y hecho. Sortear la multitud, subirse a la moto aparcada delante del Col.legi de Periodistes, tumbar por Gran Via y... paseo de Gràcia cortado; Roger de Llúria cortado; tráfico infernal; vuelta enorme por Girona, Mallorca, infracción de tráfico en Enric Granados, más infracciones hasta Balmes / Còrsega. Por el camino se ha puesto a llover, y han pasado casi tres cuartos de hora.

Pero finalmente Espinàs ya está delante de la moto. Sigue lloviendo. La operación se aborta. "Me he perdido una buena foto de promoción", comenta. Pero además, ¿y si aún hay lectores esperándole? Hay que hacer algo.

'OPERACIÓN ESPINÀS II'

Así que el motorista voluntario se dirige a la Casa del Llibre. Doce lectores han esperado bajo la lluvia a Espinàs. Afortunadamente, un buen conversador como Rafel Nadal, que firmaba en la silla de al lado, los ha ido entreteniendo. Lamentablemente, solo se les puede ofrecer un detalle como consolación. Escriben su nombre y dirección y lo introducen dentro del libro (7 de 'La vella capitana', 4 de 'El teu nom és Olga' y 1 de 'Una vida articulada'). Este motorista se los lleva bajo el brazo. Y en los próximos días, Maria Dolors Salavert, Joaquim Reixach, Xavier Suárez, Benita Soria, Consol Rodríguez, Santi García, Natalia Martínez, Maria Magdalena Rodríguez, Mercè Figueres, Rocío de Sardi, Sara Farré y Silvia Zimmermann recibirán por correo su libro firmado. En correo, no en moto.