TRAS LA RESOLUCIÓN DEL CONSEJO DE SEGURIDAD

Zapatero: "La comunidad internacional no se va a dejar engañar por el régimen libio"

PILAR SANTOS / Madrid

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El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y el secretario general de la ONU, Ban Ki Moon, han comparecido este mediodía en la Moncloa y han advertido al coronel Muamar Gadafi de que no se creen el alto el fuego decretado esta mañana por el régimen libio. Tanto Ban como Zapatero han asegurado que la comunidad internacional aplicará la resolución aprobada anoche por el Consejo de Seguridad, la cual permite el uso de la fuerza para imponer una zona de exclusión aéreo y proteger así a los civiles.

“La comunidad internacional no se va a dejar engañar por el régimen libio”, ha sentenciado el presidente español en las escalinatas del edificio del Consejo de Ministros de la Moncloa. Igual de contundente se ha mostrado Ban, que ha asegurado que no hay pruebas de que Gadafi haya dejado de violar los derechos humanos del pueblo libio.

Una "contribución importante" española

Zapatero ha explicado que la comunidad internacional tiene medios para verificar si es cierto el alto el fuego decretado por Gadafi y ha añadido que esa información se analizará mañana en una cumbre que se celebrará en París. El presidente francés, Nicolas Sarkozy, ha convocado una reunión extraordinaria con líderes europeos, árabes, africanos y la OTAN para coordinarse en la aplicación de la resolución de la ONU.

El jefe del Ejecutivo ha confirmado lo que había avanzado la ministra de Defensa, Carme Chacón, horas antes: el Gobierno pondrá a disposición de la OTAN las bases aéreas de Rota (Cádiz) y Morón (Sevilla), así como medios navales y aéreos. El Gobierno ha querido dejar claro que la intervención militar internacional en Libia en ningún caso implicará el despliegue de tropas en el territorio del país norteafricano, algo prohibido por la propia resolución de la ONU que da luz verde al uso de la fuerza. 

Zapatero ha dicho que España está en disposición de hacer “una contribución importante” en la misión de parar los pies a Gadafi. El presidente ha anunciado que ya ha solicitado al Congreso autorización para que las Fuerzas Armadas puedan participar y ha autorizado a Estados Unidos el uso de esas bases, y ha añadido que está dispuesto a ser él mismo quien comparezca en la Cámara. Ahora, será la mesa del Congreso la que decidirá el día y la forma.

El Gobierno no descarta que ese trámite en el Congreso se dé a posteriori. El vicepresidente primero, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha comentado que "si los acontecimientos obligan a tomar una decisión y la Cámara no ha podido reunirse", el Ejecutivo pediría entonces la "convalidación" de su decisión de participar en la misión.

A última hora de esta tarde está previsto que se reúna la comisión delegada del Ejecutivo ante situaciones de crisis para analizar los acontecimientos relacionados con Libia. Este gabinete, que está presidido por Zapatero, lo componen los tres vicepresidentes (Alfredo Pérez Rubalcaba, Elena Salgado y Manuel Chaves); las ministras de Asuntos Exteriores y Defensa, Trinidad Jiménez y Carme Chacón, respectivamente, así como el titular de Presidencia, Ramón Jáuregui, y el director del CNI, Félix Sánz Roldán.

Zapatero mantiene informado de todas las circunstancias al Rey y al presidente del PP, Mariano Rajoy, cuyo partido ha dado su apoyo a la participación en esta misión.