El voto en Euskadi de los 'exiliados' por ETA divide a los expertos

Un nuevo escollo se ha aparecido en el difícil camino hacia el final definitivo de la violencia en el País Vasco: el pulso por el censo electoral. El empeño del Gobierno de Mariano Rajoy en conseguir que los vascos que en las últimas décadas se han visto empujados a abandonar Euskadi por la amenaza de ETA puedan votar en sus circunscripciones de origen aunque no estén empadronados en ellas ha abierto un nuevo frente de disputa política al topar con el escepticismo del partido socialista y el rechazo visceral de las fuerzas nacionalistas y ha dividido a los juristas expertos en la cuestión consultados por el Ejecutivo.

Haciendo suya la iniciativa planteada en su día por el presidente del PP vasco, Antonio Basagoiti, el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, ha decidido coger personalmente la bandera de la reforma de la Ley Electoral paradevolverel voto a losexiliados. Fernández Díaz inauguró ayer en Madrid una reunión de una veintena de expertos en derecho electoral convocada por el Ministerio del Interior para debatir sobre la viabilidad de la propuesta.

En su intervención, el ministro negó que la iniciativa del PP responda a un «cálculo electoral» y aseguró que restituir el voto en Euskadi a quienes se han visto obligados a trasladarse a otros lugares es una cuestión «de reparación y de justicia». «No pensamos en las próximas elecciones, sino en las próximas generaciones», afirmó Fernández Díaz, quien admitió que una medida de estas características requerirá una «gran finura jurídica» y advirtió de que el PP tiene una mayoría suficiente para modificar la Ley Electoral.

DIVISIÓN / La primera reunión que mantuvieron ayer los juristas y catedráticos elegidos por el Gobierno, celebrada a puerta cerrada, ya sirvió para constatar las dudas y la división de opiniones que suscita el proyecto. Tres fueron las cuestiones más debatidas: quién puede ser consideradoexiliadopor causa de ETA; la posible colisión con la ley electoral vasca, y la ausencia de datos en el censo sobre los motivos por los que se marcharon de Euskadi quienes así lo hicieron. Según relataron a Servimedia algunos de los presentes en la reunión, uno de los expertos llegó a proponer que se concediera la posibilidad de votar en sus circunscripciones de origen a todos los que abandonaron el País Vasco y Navarra durante un periodo de tiempo, independientemente de los motivos, planteamiento que fue tachado de «excesivo» por algunos juristas.

Insistiendo en un argumento ya apuntado por él mismo y por otros dirigentes socialistas, el consejero vasco de Interior, Rodolfo Ares, señaló ayer que le parece que esta iniciativa «tiene muchísimas dificultades desde el punto de vista jurídico para salir adelante, y también algunos inconvenientes políticos».

Uno de estos inconvenientes es la oposición frontal del PNV, que atribuye la propuesta del PP a «un claro interés electoralista» y la cataloga de «fraude en toda regla». «El PP -declaró a Efe el diputado nacionalista Aitor Esteban- se niega a reconocer la realidad de Euskadi tal como es, con sus mayorías políticas, y quiere manipular el censo a su antojo».

Esta posición es compartida por CiU, que subrayó la gran dificultad que entrañaría distinguir quién ha abandonado Euskadi exclusivamente por la amenaza de ETA.