El Vaticano llama a resolver el proceso soberanista catalán "dentro del marco de la legalidad constitucional"

El secretario de Estado del Vaticano, Pietro Parolin.

El secretario de Estado del Vaticano, Pietro Parolin. / periodico

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Después de esquivar la cuestión sobre el proceso soberanista en Catalunya durante mucho tiempo --el propio Papa Francisco afirmó, en una entrevista el pasado mes de junio, que los procesos de secesión se debían de tomar "con muchas pinzas" y evaluarlos "caso por caso"--, el Vaticano ha terciado finalmente en el asunto y ha dejado clara su posición: la reivindicación planteada por los independentistas debe resolverse "dentro del marco de la legalidad constitucional".

Así lo manifiesta el secretario de Estado del Vaticano, Pietro Parolin, en una entrevista que publica este jueves la revista 'Vida Nueva', en la que aboga por una actitud abierta y de diálogo para hacer frente a este reto. La publicación sale a la venta el mismo día en que han tomado posesión de sus cargos los nuevos 'consellers' del Govern de Carles Puigdemont, que el día de su investidura se comprometió a aplicar de inmediato la declaración de ruptura aprobada por el Parlament.

A pesar de que Parolin subraya que se trata de un "asunto interno español", insiste hasta en tres ocasiones en que las reivindicaciones separatistas de Catalunya deben de resolverse en el marco de la Carta Magna. "Desde la responsabilidad, la búsqueda del bien común y el respeto de la legalidad vigente, deben buscarse puntos de encuentro para facilitar y llevar a cabo un diálogo serio, sereno y auténtico", destaca el secretario de Estado.

Asimismo, Parolin alude a la "madurez política del pueblo español, manifestada especialmente durante el proceso de transición a la democracia" como instrumentos para encontrar una salida al problema.

EL DESAFÍO ESPAÑOL

Entre otros temas, el secretario de Estado del Vaticano aborda también el escenario político en España dibujado tras las elecciones del pasado 20 de diciembre, con un "resultado fragmentado". En este caso, reclama igualmente diálogo para evitar una "ingobernabilidad que no favorece a nadie" y ofrece las aportaciones de la Iglesia para ayudar a forjar la estabilidad.

Parolin juzga que es un "importante desafío para el país" y considera que el resultado electoral lleva implícita "la petición de una mayor colaboración dentro del mundo político".