Las estrategias

Torres-Dulce moviliza a los fiscales catalanes por el 9-N

El fiscal general del Estado quiere fijar una posición común sobre la consulta

El fiscal general del Estado, Eduardo Torres-Dulce, el martes, en Bilbao.

El fiscal general del Estado, Eduardo Torres-Dulce, el martes, en Bilbao.

J. G. ALBALAT / BARCELONA
AGENCIAS / BILBAO

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El fiscal del Estado, Eduardo Torres-Dulce, ha convocado este jueves en Madrid a los cuatro fiscales provinciales y al superior de Catalunya para consensuar una posición común sobre la consulta soberanista y cómo actuar cuando el Tribunal Constitucional la suspenda, según informaron ayer a este diario fuentes conocedoras de la citación. No existe ningún documento previo al encuentro, que les fue comunicado a los fiscales catalanes el lunes, sino que se trata de una reunión para debatir y acordar una posición común.

Aunque el propio Torres-Dulce manifestó ayer que la reunión no se ha organizado única y exclusivamente para abordar «el tema de las deliberaciones» del 9-N, es evidente que el solo hecho de la convocatoria, que tendrá lugar un día antes de que el Parlament apruebe la ley de consultas, es una medida más de presión al presidente de la Generalitat por parte del Estado.

«A PIE DE OBRA» / En declaraciones a los periodistas en el Palacio de Justicia de Bilbao, el fiscal general consideró que el ministerio público debe actuar en caso de que se desobedezca el hipotético veto a la consulta. Lo contrario sería «prevaricar», aseguró. «O aceptamos el Estado de derecho o nos situamos a extramuros de él», remachó Torres-Dulce, antes de volver a amenazar con el Código Penal.

La semana pasada, el máximo representante de la fiscalía ya dejó claro que si se comete alguna conducta «marcada en el Código Penal, la fiscalía y los tribunales actuarán en consecuencia». Ayer, después de mostrar su confianza en que no se producirá esta situación, insistió en esta idea. En cambio, esquivó la pregunta de los delitos en los que incurrirían Artur Mas y los otros políticos catalanes si siguen adelante con la consulta a pesar de la prohibición. «No sé si se van a producir [actuaciones improcedentes] ni cómo se van a producir. Por lo tanto, anticipar cuál va a ser la respuesta es un ejercicio de ciencia ficción en este momento», afirmó Torres-Dulce. No obstante, lo más probable es que en el caso de que Mas se salte la orden del Constitucional se le persiga por un delito de desobediencia.