Santamaría avisa a Mas de que si no renuncia a la cosulta es difícil buscar vías de encuentro

La vicepresidenta y portavoz del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha insistido hoy en que el Ejecutivo central no aceptará de ninguna manera la celebración de una consulta en Catalunya que considera "ilegal". En cuanto a las posibilidades de que en la inminente reunión entre Mariano Rajoy y Artur Mas (aún no tiene fecha concreta) se aborden otras cuestiones como una mayor financiación para los catalanes, Santamaría se ha limitado a decir que Rajoy irá a esa reunión con "espíritu abierto", aunque necesita conocer "en qué punto" está Mas y si se enmienda -esto es, si retira la convocatoria de referendo- para poder buscar alternativas.

"La posición de entrada del presidente Mas dificulta mucho la apertura de un proceso de diálogo", ha advertido la portavoz gubernamental en la rueda de prensa posterior a un consejo de ministros que hoy tuvo algo de extraordinario, ya que durante su primera parte (con deliberaciones pero sin decisiones) estuvo presidido por el jefe del Estado, el rey Felipe VI.

Finalizada la reunión de los ministros, Sáenz de Santamaría se enfrentó a una comparecencia ante los medios de comunicación en la que fue preguntada en varias ocasiones por las intenciones con las que el Gobierno acude a la cita con el president de la Generalitat, respondiendo siempre que el visto bueno a un referendo no se contempla en ningún caso.

Así, apuntó que Rajoy está abierto al "diálogo y al consenso" en cuestiones que puedan resultar beneficiosas para el desarrollo económico, la creación de empleo o el fomento del clima de convivencia en Catalunya, resaltado que hay "muchos temas" en los que ambos dirigentes podrían entenderse. "Pero nosotros necesitamos conocer en qué punto está Mas, poqrue si está en el sostenella y no enmendalla, eso hace difícil otras alternativas", agregó Santamaría.

Por último, la vicepresidenta confirmó que el presidente tiene intención de informar al nuevo jefe del PSOE, Pedro Sánchez, sobre los contenidos de la reunión con Mas, aunque eludió precisar si se pondrá en contacto con él antes o después de que se produzca la cita. Eso sí, Santamaría no perdió ocasión de afear a Sánchez su actitud a la hora de ordenar a sus eurodiputados que se rompiera el pacto con los conservadores y no se apoyara a Jean Claude Juncker en la comisión de la UE. "Respetar los acuerdos es bueno para que a uno se lo tomen en serio", concluyó.